He leído muchos estos días sobre la actuación de la Selección Española que dirige Sergio Scariolo en los Juegos Olímpicos, para mí cuando las opiniones se hacen desde una crítica constructiva, con un análisis razonado y fundamentado todas son respetables, es lo que trataré de hacer con este post.
Como suele suceder cuando llegan estos casos, las críticas al seleccionador llegan desde todas partes y se cuestiona todo, eso sí a posteriori y desde nuestras butacas de espectadores, pero aunque no nos guste esto es el deporte y como entrenadores (me pongo en su piel), hay que aceptarlo.
Desde mi subjetiva perspectiva y sin meterme en un análisis demasiado profundo a nivel táctico, me voy a mojar y hacer unas pequeñas reflexiones al respecto:
EL GRUPONuestro grupo considerado por muchos como "de la muerte", era fortísimo con cuatro selecciones de muy alto nivel, muy igualadas y con partidos de máxima tensión durante los cuarenta minutos. Pequeños detalles han decidido los encuentros, el físico ha sido muy importante especialmente bajo aro y en la presión al balón, ahí hemos sido inferiores. A pesar de haber sido competitivos y llegar con opciones hasta los últimos segundos del último partido, hay que dar también importancia a los rivales con los que nos hemos encontrado.
A pesar de que Sergio ha intentado paliar ese déficit defensivo con un entramado táctico que tantas veces le ha dado resultado, con uso de defensa mixta caja+uno, zona 3-2, zonas press, etc. Sin embargo, los equipos rivales lo tenían bien estudiado (buenos scoutings) y esos recursos tácticos no han sido determinantes como en otras ocasiones.
SERGIO SCARIOLO
La figura de Sergio Scariolo no tiene discusión desde mi punto de vista, creo que es el mejor seleccionador que podríamos tener, su trayectoria y palmarés al frente de la Selección nadie la puede discutir. Digo esto con conocimiento de causa, además de ver todos los partidos de la selección en toda su etapa, he asistido como entrenador invitado a una semana de entrenamientos, conforma un STAFF Técnico perfectamente sincronizado y organizado, los entrenamientos se planifican meticulosamente y con todo lujo de detalles, se hace un scouting espectacular de los rivales, Sergio sabe delegar y dar el sitio adecuado a cada uno de sus ayudantes, se cuida con mimo a los jugadores y se crea un clima familiar de compromiso y entrega absoluto.
¿Quiere esto decir, que no se pueda equivocar?, por supuesto que no, como cualquier entrenador puede cometer errores y seguro que los podido cometer, desde la configuración del roster final (sonaron los nombres de Jankuba Sima, Joel Parra y Juan Núñez como posibles), desde el reparto de minutos en los tres partidos (ahora a posteriori todos los reclamamos para Pradilla y Brizuela), desde el planteamiento de los partidos, desde decisiones puntuales, desde pedir tiempos muertos y de tantas decisiones que en décimas de segundo se tiene que tomar en los partidos.
Está claro que Sergio habrá cometido errores, como también aciertos, pero en una balanza global está claro que lo positivo está por encima de lo negativo. Sergio ha hecho posible que España sea competitiva, que nunca se rinda y que tenga el respeto internacional.
LOS PARTIDOS
A continuación voy a exponer mi punto de vista sobre el torneo Olímpico de España, pero INSISTO centrándome solo en los partidos y en su desarrollo, sin querer ir más lejos y en hablar de cambios estructurales profundos por haber sido eliminados de los Juegos Olímpicos como he leído por ahí.
Creo que España no estuvo bien y de alguna manera empezó a cavar su destino por el mal partido que realizó ante Australia. Dos factores esenciales nos hicieron mucho daño: a) El rebote (nos cogieron demasiados rebotes ofensivos, aprovechados con segundos tiros o con nuevas posesiones para el rival) y b) En nuestro afán por querer ganar el partido, nos precipitamos en los dos últimos minutos y nos metieron dos triples yéndose la diferencia final a doce puntos, que fue clave para quedarnos fuera en el triple empate con Grecia.
El equipo de Sergio Scariolo reaccionó muy bien ante Grecia, supo parar a Antetokounmpo, mejoró el rebote y ganó merecidamente tras jugar un buen partido, con convicción y juego colectivo. Quizás su mejor actuación global en los cuarenta minutos.
Canadá ha demostrado ser el mejor equipo en la fase de grupos, España sufrió mucho durante los tres primeros cuartos, especialmente por el poderío físico defensivo del equipo de Jordi Fernández (actividad de manos, desplazamientos defensivos, agobio constante, anticipación de líneas de pase, etc), que condicionó bastante nuestro ataque, provocando circulaciones de balón poco fluidas que nos originaron más pérdidas y errores de lo habitual.
Sin embargo, se supo reaccionar y el equipo se levantó igualando su nivel de dureza defensiva, siendo verticales en ataque (Dario Brizuela fue la mecha y el auténtico revulsivo), moviendo más rápido el balón y con mas fluidez y con un Jaime Pradilla bajo aro, que reivindicó mas presencia en el juego interior.
BASES Y ESCOLTASSergio apostó en el quinteto inicial y dio muchos minutos al dupla Lorenzo Brown-López Aróstegui y sinceramente no le funcionó.
Lorenzo Brown no ha respondido a la confianza depositada en él (en su actuación más decepcionante), ha acaparado demasiado el balón (demasiados botes innecesarios), sin ser resolutivo en ataque y sin repartir juego con acierto como de él se esperaba, la ausencia de un director de orquesta con autoridad, lo acusó negativamente el equipo nacional. Además no ha sido resolutivo en su anotación, tomando demasiadas decisiones erróneas y acumulando pérdidas evitables.
López Aróstegui, escolta del Valencia Basket, que teóricamente podía ser un especialista defensivo para contrarrestar a jugadores esenciales de los rivales, aunque estuvo muy voluntarioso no se hizo notar con la contundencia necesaria y en ataque tampoco aportó demasiado.
Alberto Díaz fue el elegido como teórico segundo base, su actitud y capacidad defensiva es innegable, en ataque apenas si ha mirado el aro, aunque en honor a la verdad he echado en falta mas minutos en pista del base malagueño.
Sergio Llull bajo mi punto de vista ha hecho unos buenos Juegos Olímpicos, su acierto en triples ha sido notable con decisión y valentía como siempre acostumbra, incluida alguna mandarina que otra. En defensa le costó algo más (no es su mejor virtud) y sufrió en demasía el agobio defensivo de los canadienses que le forzaron varias pérdidas en ataque no habituales (quizás por el cansancio). Fue uno de los grandes líderes del equipo asumiendo responsabilidad y no rindiéndose nunca
Dario Brizuela, sin ningún duda la gran revelación, "la mamba vasca" fue el gran revulsivo ante Canadá, con determinación y buenas decisiones, muy rápido, valiente en sus acciones individuales de 1c1, tanto con su "Step Back" como con sus entradas a canasta y anticipación defensiva, demostró con creces que estaba para jugar mas minutos de los que jugó en los dos primeros encuentros. Contra Canadá anotó 17 puntos en 14 minutos (10 puntos consecutivos).
ALEROS
Rudy Fernández se dejó la piel, el alma y el físico. Seis Juegos Olímpicos le contemplan, su carácter, su liderazgo y su carisma no se pueden discutir. Tras el gran golpe en el cuello en el segundo partido, quiso jugar contra Canada pese a estar mermado. Dio la cara como siempre, creo que muy por encima de su actuación en estos juegos, lo destacado es su aportación al baloncesto español ¡CHAPEAU! a una gran trayectoria.
Alex Abrines ha dado un paso más en defensa pero se le puede exigir mucho más por la calidad que atesora, nadie puede poner en duda su buen tiro de tres, pero fue algo guadianesco (apariciones esporádicas con poca continuidad en su participación en el juego), ante Canadá jugó su mejor partido.
PIVOTS
La pareja Santi Aldama y Willy Hernangómez han acaparado la mayoría de minutos del juego interior español, Willy como center y Aldama como ala-pívot.
Santi Aldama ha sido nuestro mejor bastión en ataque y máximo reboteador, en especial por su acierto en el triple, su porcentaje en tiros libres (16/17, 94%), asistiendo a sus compañeros y siempre muy participativo. Desde luego será un jugador muy importante en la próxima década, aunque ha reboteado y taponado bien, le ha costado el cuerpo a cuerpo en la lucha por coger la posición bajo tableros.
No ha habido esta vez la conexión que tanto resultado nos dio en el último europeo y en el Preolímpico entre Lorenzo Brown y Willy Hernangómez y la producción ofensiva del madrileño lo acusó, necesitábamos mas puntos suyos bajo aro y en la pintura que no llegaron. Creo que tenía que haber sido más poderoso en el rebote y con mayor contundencia bajo tableros, tiene capacidad para defender mejor, necesita fajarse más y anticipar más la recepción de sus oponentes. Así lo demostró en su defensa mixta al griego Antetokounmpo.
Juancho Hernangómez, jugó casi siempre de cuatro, eché en falta más minutos de alero para jugar en determinados momentos con tres altos. Juancho atesora un gran potencial pero no termina de alcanzarlo en su plenitud, no se puede limitar a tirar solo de tres, debe forzar mas la defensa del rival con penetraciones y trabajar bajo tableros con mayor dureza y contundencia. Luces y sombras, quedando siempre la sensación de que puede mucho más.
Usman Garuba, peleó a tope en defensa pero muy tenso y acelerado, lo intenta todo pero su déficit en estatura le limita ante pívots que le sacan muchos centímetros, muy poca aportación en ataque (5 puntos en tres partidos).
Jaime Pradilla, otra de las gratas sorpresas que mereció más minutos en cancha, ha llamado con fuerza a la puerta de próximos campeonatos como un jugador en que confiar. No llegó a jugar contra Australia, contra Grecia jugó doce minutos de calidad anotando siete puntos (100 % de efectividad) y contra Canadá en once minutos anotó 10 puntos (5/6) y cogió seis rebotes. Gana muy bien la espalda del defensor por línea de fondo, es capaz de anotar de tres, va bien al rebote, es listo y se faja.
Fotos FIBA, extraídas de la web de la FEB