**Los pequeños detalles diferencian a los equipos, pero cuando hablamos de esta circunstancia no debemos ceñirnos exclusivamente al desarrollo de los partidos sino que debemos extrapolarizarlo a todos los aspectos del trabajo de une equipo (entrenamientos, viajes, concentraciones, partidos, etc).
Si nos centramos en los entrenamientos hay pequeñas cosas que siempre se deben de cuidar, a veces pueden parecernos banales y de escasa importancia, aunque podamos pecar de exceso de meticulosidad desde mi punto de vista hay una serie de reglas y normas que todo el mundo debe cumplir, enumeremos algunas**:
-Sólo se permitirá que un jugador falte a un entrenamiento por: 1) lesión, 2) por emergencia familiar, 3) por estudios y 4) por trabajo (si no son profesionales).-Cuando un entrenador habla todo el mundo debe de escucharle. Esto también debe hacerse si un jugador habla referido a lo que estamos entrenando.
-Cuando suena el silbato, casa cualquier actividad.
-No se admitirá que ninguna persona (directivos, prensa, etc) pueda distraer a los jugadores o entrenadores durante las sesiones de entrenamiento.
-No se permitirán malos modos o expresiones malsonantes durante el desarrollo de las sesiones.
-Hay que conseguir que los jugadores muestren entusiasmo ante el esfuerzo y con lo que hacen, para ello la motivación y la predisposición previa son factores claves.
-Cuando se está entrenando salvo que algún ejercicio lo requiera nadie debe sentarse, arrodillarse o tumbarse, esto será extensivo tanto a jugadores como entrenadores.
-Debemos intentar aumentar la confianza del jugador a través del entrenamiento, para ello utilizaremos los refuerzos positivos (alabanzas y elogios merecidos), de forma individual y colectiva.
-Como entrenadores tenemos la obligación de ayudar a los jugadores para que salgan de cada entrenamiento mejor que cuando entraron a él.
-Si una regla no es respetada el castigo se puede aplicar de forma individual e incluso de forma colectiva (si es el caso), aplicamos el concepto de la presión del grupo sobre el individuo.
-El jugador debe tratar de responde a su entrenador y también de no defraudar a sus compañeros. Si un jugador vulnera una regla, su acción también perjudica al equipo.
-Los entrenadores debemos aplicar justicia en nuestras críticas y en la aplicación de los castigos, tratando con equidad a todos los jugadores y no haciendo ningún tipo de distinción.
-Por último no olvidemos que la crítica hay que ejercerla sobre las actuaciones y no sobre las personas.
FUENTE: Dean Smith
otra norma puede ser que el entrenador no hable demasiado y aburra a los jugadores, para no enfriarse mucho durante el mismo.
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