**Como suele ser habitual en "Tripi" siempre termina metiendo el dedo en la llaga, para mi es uno de los entrenadores cordobeses que con mas claridad expone sus ideas y sus métodos, además de buen entrenador utiliza en sus escritos una gran elocuencia y fluidez verbal y se muestra como una avezada pluma que mas de uno quisiéramos, lo del entrenacol me ha llegado al alma, jajaja. ¡ENHORABUENA TRIPI!, por tus artículos, por tu valentía y por lo que aportas como entrenador a tantos y tantos entrenadores de formación que leen este blog, son mas de los que te imaginas**.
500 INTERNAL SERVER ERROR
“Pensar es fácil. Actuar es un poco más difícil. Pero
actuar como se piensa es lo más difícil de todo”. (Goethe).
Un fenómeno que ocurre muchas veces en los equipos de
baloncesto es la existencia de instrucciones contrapuestas. Un jugador recibe órdenes
contradictorias de manera inconsciente por parte de su entrenador, empieza a dudar
y acaba en un estado de confusión del que no sabe salir y su Sistema Operativo se queda
colgado y aparece el fatídico MENSAJE: 500 Internal server error.
Debemos cuidarnos mucho de no dar órdenes incompatibles.
Si le decimos a un jugador mini o infantil que se abra a la banda y corra al contraataque
lo más rápido que pueda y al mismo tiempo que mantenga las distancias y no se aleje porque
su compañero no tiene fuerzas para llegar con el pase, estaremos creándole un conflicto en
su toma de decisiones y no sabrá a qué atenerse.
Del mismo modo ocurre con cierta frecuencia que
trabajamos con nuestros jugadores en categorías de formación el mantener las distancias y los
espacios, y al mismo tiempo les estamos enseñando el bloqueo directo que es todo lo
contrario.
Es muy común también que al dar órdenes que generan
confusión nos enervemos al notar que el jugador no las cumple con rapidez y eficiencia y
cuando este intenta explicarnos el motivo, no le escuchemos diciéndole al mismo tiempo que
debe prestar más atención a lo que se le dice.
A principios del siglo XX Isaac Asimov promulgó las Tres
Leyes de la robótica que rezan así:
1- Un robot no hará daño a un ser humano o, por inacción,
permitir que un ser humano sufra daño.
2- Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres
humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la 1ª Ley.
3-Un robot debe proteger su propia existencia en la
medida en que esta protección no entre en conflicto con la 1ª o la 2ª Ley.
Como podemos ver las leyes de la robótica de Asimov no se
contradicen y desde luego lo jugadores no son robots.
Ahora nosotros vamos a dictar tres puntos con normas de
nuestra defensa individual, que bien pudieran ser las siguientes:
1-No defenderemos por encima de la línea del balón.
2-Defenderemos fuertemente la línea de pase.
3-En la defensa al hombre-balón, negaremos un lado
ofreciéndole al atacante un pasillo por el que llegaran las ayudas.
Como vemos en el gráfico, los defensas 1 y 3 están defendiendo a su par presionando en primera línea de pase, mientras el defensor 2, que defiende al balón, niega un lado a su atacante. Podemos observar como los defensores 1 y 3 están incumpliendo la 1ª de nuestras normas: NO defender por encima de la línea de pase, pero si retroceden por debajo de la línea del balón, NO pueden defender la primera línea de pase.
Claramente hemos dado dos normas contrapuestas y que se colapsan.
Asimismo, si los defensa 1 y 3 defienden en línea de
pase, NUNCA podrán llegar a la ayuda si el hombre-balón se escapa de su defensor 2, ya que están
por encima de la línea del balón, por lo que no podemos pedirles que hagan ayudas defensivas.
Por tanto debemos corregir nuestras normas defensivas y adaptarlas a la realidad o
en su defecto incumplirlas o renunciar a ellas en según que sitios y/o momentos. Una cosa
debemos tener clara: No podemos quererlo todo.
Para evitar confundir a nuestros jugadores con órdenes
contradictorias, es bueno sincerarse con uno mismo y analizar nuestro plan, nuestro método y
organizar mejor las ideas antes de llevarlas a cabo en la pista.
Desde luego como entrenadores de base debemos poner
nuestra inteligencia al servicio de nuestros jugadores y saber que principalmente somos
formadores y no caer en la publicidad engañosa como esta.
“Toma un entrenacol al día. Sube la autoestima del
Entrenador”
*Entrenacol, para el entrenador entrenador.
*Toma un Entrenacol al día y olvídate de la técnica
individual. Con entrenacol la táctica será tu mejor aliada.
*Advertencia: Si toma mas de un Entrenacol al día puede
sufrir exceso de pizarreo y tacticismo.
*En caso de sobredosis acuda urgentemente a un Clinic
para entrenadores de formación.
En realidad todos, en mayor o menor medida, hemos abusado
en nuestra juventud del Entrenacol, que es fuertemente adictivo, pero se puede
salir de esa adicción aplicando el sentido común, poniendo los pies en el suelo y sabiendo
que tenemos jugadores en edad de formación y no de ACB.
Por otra parte, es frecuente escuchar en charlas con otros
entrenadores el famoso: “YO SE LO DIGO”.
Yo le digo que bloquee el rebote. Yo le digo que no tire
desde el pecho. Yo le digo que no pase de cuarto hombre los bloqueos. Yo le digo que… Entonces
siempre me pregunto lo mismo: ¿Lo entrenará?, porque puestos a decirle a un jugador algo, lo
mejor y más fácil sería decirle: “Tu juega como Stephen Curry” y se acabó el problema. Claro que
en este punto el S.O. del jugador se colgaría y pondría un mensaje parecido a este: 305
ERROR: NO FOUND DATA INSIDE.
Como entrenador de baloncesto sé que una cosa es la
importancia que le damos al tema de la enseñanza de los fundamentos, lo que decimos, y otra bien
distinta es el tiempo que le dedicamos a diario a la práctica de la técnica individual, lo
que hacemos. En mis encuentros con otros entrenadores hablo de ello con frecuencia. Sin
embargo, a pesar de creer en la técnica individual como algo básico y muy importante, pocos
pensamos en ello lo suficiente como para actuar y la inmensa mayoría, tristemente, hacemos
muy poco al respecto.
Este es uno de los grandes dilemas del entrenador. Todos
queremos triunfar; todos pensamos constantemente en el éxito; todos profesamos abiertamente nuestro
gran deseo de ganar, pero al momento de actuar, lo hacemos de una manera contraria
a los principios del éxito.
Debemos tener claro que ganar no significa necesariamente
estar haciéndolo bien, ese sería un análisis muy simple además de erróneo.
Por otra parte, quiero decir que este artículo, y otros que
he escrito para este blog, sólo son reflexiones que buscan remover un poquito nuestra conciencia
como entrenadores y que, a su vez, recapacitemos si hacemos todo lo correcto para lograr la
mejora de nuestros jugadores, nada más lejos de mi pensamiento que querer denostar a ningún
compañero/a ni tan siquiera molestarlo.
AUTOR: ÁNGEL FERNÁNDEZ TRIPIANA "Tripi" (Entrenador CV Carmen-Córdoba)