Aceitunas Fragata
Morón se lleva un partido muy disputado y que le permite sumar la tercera
victoria consecutiva ante un rival que plantó cara hasta el final, sin rendirse
ante la gran ventaja que cosechó el equipo andaluz en el tercer cuarto, cuando
parecía que estaba todo hecho. Un partido de dos caras, que empezó con Albacete
con más acierto que Aceitunas Fragata Morón y que terminó con un gran
espectáculo baloncestístico de primer nivel.
(Foto de Manuel Lorenzo, extraida de la web www.condospelotas.es/)
El primer cuarto
empezó con un dominio claro del Arcos Albacete dentro de la igualdad con la que
ambos equipos disputaron esta primera mitad. Muy bien plantados en ataque,
movían el balón con mucha fluidez, superando la presión defensiva de Aceitunas
Fragata Morón. Pero la calidad de Kris Davis era todo lo que necesitaba el
equipo local para desarmar el entramado moronense gracias a su clarividencia a
la hora de repartir balones. El conjunto andaluz trataba de sobreponerse a este
inicio fulgurante de los albaceteños gracias a las buenas canastas de Alo
Marín, Jesús Chagoyen y José Alberto Jiménez, aunque costaba mucho encontrar
huecos con los que penetrar a canasta. El periodo terminó con dominio local de
8 puntos, 24-16.
Y el segundo
comenzó con la misma tónica: Albacete se apoyaba en Davis y en Elías, que
hacían mucho daño en el rebote ofensivo, echando por tierra la brutal presión
que Rafa Rufián había preparado a toda pista para asfixiar la salida del Arcos
Albacete. Pero se escapaban en el marcador, llegando a poner una ventaja de 14
puntos gracias al buen hacer de Short, que se beneficiaba de esos rebotes
ofensivos y contestaba a los triples de Rubén Gutiérrez. No obstante, el
trabajo defensivo de Morón comenzó a hacer mella en el partido y en el
marcador. Grandes momentos de Alejandro Rodríguez y Alo Marín, que a base de
triples y tiros libres conseguían que esa brecha en el marcador se quedase en 4
puntos a la llegada del descanso. 43-39 reflejaba el electrónico.
Serían los últimos
momentos en los que Aceitunas Fragata Morón estuviese por debajo en el
marcador, ya que la segunda parte fue un auténtico recital del conjunto. A la
brutal presión defensiva se sumaba un gran acierto en el tiro de tres, con los
Alejandro haciendo muchísimo daño. Gran partido de nuevo de Alo Marín, que se
fue hasta los 19 puntos al final, acompañado en este cuarto por un Alejandro
Rodríguez que se colaba en la zona con mucha facilidad. Esta gran anotación se
vio acompañada por el cierre en el rebote gracias a la presencia intimidante de
Ola Keshinro y al imán que tiene Tyler Gaffaney en el rebote. También se vio
beneficiado Morón de varias técnicas que se saldaron con la expulsión del
técnico de Arcos Albacete y el consiguiente desconcierto de sus jugadores, que
no entendían las decisiones arbitrales. Para colmo de males, ambos equipos
perdieron durante el tercer cuarto a sus bases titulares por un choque entre
los dos. Kris Davison pudo volver, pero Javi Marín se conformó con ver el resto
del partido desde el banquillo. El cuarto se cerraba con un +10 en el
electrónico gracias a un triple de Tyler.
El último periodo
tuvo dos caras. Aceitunas Fragata Morón continuó haciendo mella en el marcador
y, en un momento dado, parecía que había finiquitado el partido. Arcos Albacete
no encontraba opciones claras para atacar o frenar el ataque visitante. Solo la
buena actuación de Short parecía dar esperanzas a los locales. Pero Tyler
echaba un jarro de agua fría sobre las aspiraciones del equipo albaceteño con
sus canastas. Lo que pasa es que esto es la LEB Plata, baloncesto en estado
puro, y no hay nada cerrado. A falta de tres minutos, Arcos Albacete comenzó a
creer en la remontada y la acarició con la yema de los dedos gracias a un
importantísimo triple de Kris Davis que ponía el 79-80 en el marcador. Fue
nadar para ahogarse en la orilla, ya que tiros libres de Placide Nakidjim y
Rubén Gutiérrez (como en la ida) cerraban la tercera victoria consecutiva para
Aceitunas Fragata Morón.
Comunicado de Juan Luis Mármol