Hablar
de la localidad de Ourense es hacerlo de una ciudad comprometida
históricamente con el baloncesto. Más de tres décadas de trabajo -una de
ellas en Liga Endesa- en las que jugadores como Darrell Amstrong,
Chandler Thompson, Andre Turner o Federico Kammerichs se hicieron un
nombre vistiendo la camiseta del club en un Pazo que no ha dejado nunca
de lado a su equipo.
(Ourense, plaza histórica del baloncesto, Foto: COB)
A lo largo de los últimos años, el
conjunto gallego ha peleado por tratar de asentarse en una Adecco Oro a
la que regresan tras un año en el que la vuelta de Rafa Sanz al
banquillo supuso el ascenso de categoría. Con el técnico cordobés al
frente del banquillo, el club azulón tan sólo quiere mirar hacia un
futuro que esperan les pueda servir para seguir creciendo de la mano de
unos aficionados que pueblan, semana tras semana, las gradas de un
polideportivo entregado a su equipo. Los socios del COB podrán disfrutar
este año de un equipo totalmente renovado y que pondrá todo su esfuerzo
sobre la cancha para crecer en paralelo. Así será el nuevo Club Ourense
Baloncesto:
Rafa Sanz, ideas
claras y una apuesta por el talento por pulir:
Segunda temporada consecutiva al
frente del banquillo ourensano para un Rafa Sanz que regresara mediado
el pasado curso para culminar el ascenso del COB a la Adecco Oro. Un
regreso que cumpliría el objetivo inmediato pero que llevaría consigo un
deseo de crecimiento asociado a un futuro que ya se divisa en el
horizonte: “Cuando el año pasado regresé al COB lo hice
firmando por un año más ya que tenía muy claro que el del Ourense no es
un proyecto a corto plazo sino que es un lugar en el que se puede
alcanzar el éxito a medio plazo si hay paciencia y rigor. Aquí hay
afición, respaldo de los medios de comunicación y pasión por el
baloncesto por lo que si hacemos las cosas bien podemos llegar a
conseguir un buen proyecto. Durante años ha habido tierra quemada y en
este tiempo hemos tenido que limpiar esa mala praxis para que el
producto pueda florecer por lo que ahora estamos en esa fase en la que
el producto comienza a dar sus frutos con un equipo que ilusiona”.
Con el objetivo de seguir creciendo
entre manos dio comienzo al trabajo para tratar de configurar el mejor
plantel posible acorde a las posibilidades del club: “Lo
primero que teníamos que tener claro era a quién no queríamos con
nosotros para, a partir de ahí, incorporar a gente con ganas y deseos de
hacerlo bien independientemente de su edad. Esa fue la línea que nos
llevó a construir un equipo con gente que puede hacer grandes cosas si
trabaja con ambición e ilusión, una plantilla con ganas de crecer y que
nos puede dar muchas cosas. Sabemos que somos un equipo con uno de los
presupuestos más bajos pero nuestra ilusión es muy alta y la calidad de
nuestra plantilla está muy por encima del presupuesto”.
La plantilla de Club
Ourense Baloncesto al completo:
Bases:
Raúl Mena y Rai López
Nueva pareja de directores de juego
para un Ourense que pasa página y que ha apostado por un experimentado playmaker como Raúl Mena para llevar el peso del juego del
equipo. Un hombre con conocimiento de la Liga y que dará un plus al
equipo sobre la cancha: “Raúl es un base que, si tiene
ambición, le quedan muchos años de baloncesto. Es un jugador con la
cabeza muy bien amueblada y que cuenta cada vez con un bagaje mayor, ha
sido un jugador de maduración tardía pero cuyo mejor vino está aún por
servirse”.
Su segundo de abordo será un Rai
López que llega al club con deseos de seguir creciendo tras una
complicada temporada en Granada. El base malagueño vuelve a su posición
original sobre la cancha para tratar de aportar el máximo posible en un
año clave para él: “Rai es un jugador que está ante su
última oportunidad para hacerse un jugador de verdad. Tiene una
velocidad extraordinaria en el juego y le sobran cualidades pero le
falta regularidad en el esfuerzo para poder llegar por lo que está ante
un año clave”.
Aleros: Nick
Barbour, Pablo Movilla, Alfonso Sánchez y Julio González
La única permanencia en la
plantilla respecto al año anterior es la de un Pablo Movilla que se
siente a gusto en el club y que ha renovado su compromiso con un técnico
con el que mantiene una gran sintonía. Su trabajo y experiencia servirá
de ayuda a sus compañeros de línea para adaptarse lo antes posible: “Pablo es un jugador muy bien entrenado y del que siempre digo
que debería dar las gracias a todos aquellos entrenadores con los que ha
estado ya que es un hombre que está muy bien trabajado. Tiene una
madurez personal fantástica y ha trabajado muy bien durante el verano
como deben de hacer los jugadores actualmente por lo que estoy
convencido de que hará una muy buena temporada”.
Una de las piezas más importantes
llegaba procedente de León con el fichaje de un superclase como Julio
González quien llegaría acompañado de una apuesta personal del técnico,
un Alfonso Sánchez que quiere sentirse importante de la mano del COB : “A Julio lo conozco muy bien desde hace muchos años y siempre
lo he considerado el mejor alero de toda la Adecco Oro por lo que hemos
sido afortunados de poder ficharlo. De él espero poder sacar todo el
potencial que tiene y que lo tiene que llevar a ser uno de los
referentes de la línea exterior. Por su parte, Alfonso tiene una ética
de trabajo extraordinaria y merece mejor surte; las lesiones lo han
apartado en los últimos años pero considero que aún tiene un gran
recorrido en el mundo del baloncesto y que trabaja para ello. Para
algunas personas, el que Alfonso haya estado un año inactivo puede ser
una duda pero yo, viendo el corazón que tiene, no tengo ninguna de que
va a ser un jugador muy útil para nosotros”.
El perímetro se completa con una
apuesta de futuro, un joven exterior norteamericano en el que Rafa Sanz
tiene depositadas muchas esperanzas: “Nick Barbour es uno de
los hombres más jóvenes de la plantilla y con el que tendremos que
tener paciencia ya que llega con apenas 22 años a vivir su primera
experiencia en Europa. En estas primeras semanas nos ha demostrado que
tiene una actitud fantástica y una predisposición excelente a la hora de
trabajar por lo que si tenemos paciencia y trabajamos además de manera
individual con él, puede ser un jugador consolidado en Europa en los
próximos años. Aunque llega a Ourense con la etiqueta de tirador,
estamos trabajando con él para que sea lo más completo posible ya que si
se convierte únicamente en un especialista en el tiro, su recorrido
será más escaso; estoy seguro que si mantiene esta actitud, lo puede
llegar a conseguir”.
Pívots: Javi
Múgica, Mateo Kedzo, Víctor Serrano y Andy Ogide
A la hora de decantarse por cuatro
jugadores para formar un juego interior competitivo, Sanz tuvo clara la
idea de mantener la apuesta de jugadores jóvenes y gente con hambre en
la categoría; unas cualidades que se adaptaban a la perfección a la
pareja de pívots nacionales, Javi Múgica y Víctor Serrano: “El
de Víctor Serrano es un caso parecido al de Rai López; es un jugador
que debe apuntar alto porque está ante su última oportunidad. O tira
para arriba o será la eterna promesa; si tiene ambición, concentración y
esfuerzo será un jugador de cotas mayores pero todo dependerá de su
capacidad de trabajo. Hemos depositado muchas esperanzas en él con la
confianza de que pueda dar un paso al frente aprovechando todos esos
ingredientes que tendrá que poner al servicio de su altura para ser
importante. Víctor estará acompañado de un hombre polivalente como
Múgica, un jugador que, sin tener un gran bagaje formativo tiene una
gran capacidad competitiva. Pocas veces he visto a un jugador con tantas
limitaciones técnicas ser tan valiente y decidido, no se arruga ante la
competición y eso le hace ser un jugador muy competitivo e
interesante”.
La guinda a la plantilla llegaría
con la incorporación de un Mateo Kedzo obligado a cambiar de mentalidad
tras una exigente temporada luchando por el ascenso en Burgos y con la
llegada de un Andy Ogide que repite en tierras gallegas con el objetivo
de mejorar su bagaje de la campaña anterior: “Mateo es un
jugador con una calidad técnico-ofensiva muy grande, tiene una visión
sobresaliente en ataque y nuestro objetivo será el de dotarle de una
mayor consistencia defensiva para que se convierta en uno de los mejores
pívots de toda la liga. Por su parte, Andy fue cortado
el año pasado en Lugo a los tres meses por lo que lo podemos considerar
prácticamente un rookie ya que no gozó de muchos minutos. Tengo una gran
creencia en él y creo que puede hacer una gran temporada ya que es uno
de esos jugadores que se adapta a lo que tú le dices. Es un diamante que
está por pulir y con el que habrá que trabajar mucho y dedicarle horas
para que alcance ese techo tan alto que creemos que puede alcanzar. Lo
he seguido durante mucho tiempo y creo que su paso por la liga puede
ofrecernos un mayor nivel al del año pasado”.
Un juego agresivo
destinado a la afición:
Reflexionando sobre el estilo de
juego que le gustaría obtener de sus hombres, Rafa lo tiene claro, su
plantilla no debe olvidarse de aquellos aficionados que poblarán las
gradas del Pazo con el objetivo de disfrutar: “Estoy muy
contento con la plantilla que se ha construido y estoy convencido de que
si trabajamos al 100% cada día le vamos a dar muchas alegrías a
nuestros aficionados. Personalmente creo que debo de adaptar el estilo
de juego a los jugadores que tengo en mi plantilla y en función de lo
que tenemos creo que podemos realizar un juego bastante agresivo tanto
en defensa como en ataque para tratar de sacar el máximo talento de cada
uno de nuestros hombres. Un equipo agresivo termina conectando con la
grada y al fin y al cabo ese es nuestro objetivo, jugar para el público
de una ciudad a la que le gusta el baloncesto y que tiene que sentirse
orgullosa de su equipo”.
FUENTE: Pablo Romero (Dpto Comunicación FEB)