Tengo una larga experiencia como entrenador en el mundo del basket tanto en categorías nacionales como en categorías base también llamadas de formación, aunque a mí no me gusta demasiado ese nombre porque soy de los que pienso que el jugador lo mismo que el entrenador siempre se está formando dure lo que dure su trayectoria deportiva.
Ahora que he vuelto a las canchas de nuevo, mas me doy cuenta de lo importante que son los pequeños detalles y de la paciencia que debemos tener para hacer las cosas bien y que los jugadores progresen, aprendan lo no aprendido y lo importante que es ir paso a paso, sin querer correr mas de la cuenta a pesar de que la competición ya mismo comienza, que la pretemporada es corta y que tenemos que avanzar en la preparación sin dejar de intentar ganar los partidos que se programan.
Algunos me diréis, ¿y que mas dá perder o ganar en pretemporada?, indudablemente no es el objetivo fundamental que se persigue, pero tengo que reconocer que si avanzamos ganando es mucho mejor, ya que los pocos conceptos trabajados están cogidos con alfileres y si llegan las derrotas los jugadores pueden perder confianza en lo que hacen y este aspecto psicológico también se debe cuidar.
El primer detalle por tanto que hay que cuidar es "ir despacio que tengo prisa", mas vale poco bien aprendido que mucho sin haberlo asimilado con eficacia. Como dice el refrán "No dejes que los árboles te impdan ver el bosque".
Otra cuestión que se nos plantea a los entrenadores es el siguiente: ¿Jugamos partidos de pretemporada desde el primer momento o esperamos para iniciarlos a que el equipo este mas preparado y conmayor número de entrenamientos?. Aunque respeto mucho cualquier opinión, en esta situación yo diferencio dos situaciones muy diferentes, en primer lugar un equipo en el que no hay cambio en el puesto de entrenador y otra situación es la del equipo al que llega un nuevo entrenador, que además por lo general suele ir acompañada de nuevos fichajes.
En el primer caso no hay cambio de entrenador y se mantiene el grueso de jugadores de la temporada anterior, a lo mejor no importa tanto que se jueguen partidos desde el primer momento porque los jugadores ya tienen un "poso" anterior que seguramente se mantendrá.
Sin embargo en el segundo caso con la llegada de un nuevo entrenador posiblemente se necesite entrenar mas antes de jugar partidos. Este año por primera vez en mi carrera he jugado dos partidos llevando respectivamente sólo dos y tres entrenamientos (no era muy partidario pero me sentía comprometido con dos entrenadores amigos), ambos encuentros curiosamente los hemos disputado ante dos muy buenos equipos júniors mucho mas preparados y rodados que nosotros, lo positivo que he sacado y me ha servido en esta situación de jugar con pocos entrenamientos es la posibilidad que da al entrenador de conocer mejor a sus jugadores y ver de qué pié cojea cada uno en su manera de interpretar el juego, cuales son sus mejores virtudes y también sus errores y defectos, como ven el baloncesto y que conceptos aplican y como, independientemente de que también los partidos te ayudan a mejorar físicamente y en cierto modo a mejorar la conjunción de los antiguos y de los nuevos.
Tengo que decir que este año y aunque llevamos poco tiempo juntos, tengo un grupo de jugadores con una predisposición magnífica, son gente humilde que tiene muchas ganas de trabajar y de aprender, eso indudablemente nos va a ayudar muchísimo, se sacrifican, escuchan y tratan siempre de hacer lo que se les pide, sin embargo técnicamente y tácticamente hay de todo, desde a los que vienen con una buena formación desde categorías base a otros que les pasa al contrario porque han aprendido casi de forma autodidacta y no han tenido nadie que se haya dedicado a fondo con ellos en la mejora la técnica y la táctica individual.
Ahora llega la pregunta del millón, ¿que hago para que todos avancen de forma conjunta y atienda a todos en lo que necesitan y para que progresen?, quizás mi experiencia de profesor unida a mi experiencia como entrenador me pueda ayudar en esto, está claro que en una clase no se trata igual a un niño que tiene que recuperar materias, que al que saca bien el curso, que a algún niño de altas capacidades intelectuales (superdotados), pues bien algo parecido tendremos que hacer, ¿cómo?, no me queda mas remedio que romperme la cabeza y saber programar bien los entrenamientos, distribuir bien los tiempos y los espacios, aunque será mas difícil de lo normal ya que sólo entrenamos dos días a la semana y no dispongo de entrenador-ayudante con experiencia, pero tengo a mi lado a un antiguo jugador que quiere aprender y que le orientaré para que crezca como entrenador y me eche una mano en los entrenamientos.
Hay detalles como el agarre del balón, el control postural cuando se recibe el balón, el juego sin balón, saber usar ambas manos, los cambios de ritmo y de dirección, los movimientos de piés bajo aro, los conceptos básicos de ataque y defensa, el jugar con la cabeza arriba viendo el campo, la lucha por la posición en el rebote, el saber ocupar los espacios, etc, que son fundamentales y que pase lo que pase voy a anteponer siempre que pueda a los movimientos y a los sistemas, porque estoy convencido que si los fundamentos los aprendemos bien y lo que es mas importante sabemos como y cuando aplicarlos, es la llave del éxito por encima de las jugaditas que tanto nos gustan a los entrenadores.
Este convencimiento personal creo que debe estar por encima de todo, si me apuran hasta del hecho de ganar partidos aún sabiendo que si si no se gana quien paga el precio es el entrenador. Pero a estas alturas mi mayor satisfacción será que cuando termine mi trabajo en La Rambla y ojalá dure muchos años, los jugadores progresen y crezcan baloncestísticamente. Ese es mi reto y en ello pondré todas mis fuerzas, lo único que necesito es que los jugadores se esfuercen, trabajen y me ayuden durante todo el año como lo están haciendo en este inicio de temporada, intentaré tener en cuenta esos llamados "pequeños detalles", aunque quizás no sean tan pequeños.