La defensa es sin duda una de las partes mas interesantes del baloncesto, es muy sugerente y a la vez algo ingrata. Sugerente en el sentido de que en su desarrollo permite a los entrenadores llevar a cabo o diseñar sus entramados tácticos y estratégicos e ingrata porque es una labor a veces no apreciada lo suficientemente, sobre todo cuando se compara con cualquier acción ofensiva de un jugador (mate, triple, etc), por lo general mucho mas apreciada por el espectador, aunque afortunadamente algo parece haber cambiado en dicho sentido, el grito de ¡DEFENSA! ¡DEFENSA!...cada vez se deja oír mas en las canchas de juego.
El baloncesto nos ofrece la oportunidad de poder cambiar constantemente en la elección de nuestra táctica defensiva en cualquier momento del partido, por ello cualquier entrenador que se precie tendrá dispuestas en su arsenal táctico diferentes tipos de posibles defensas.
Elegir la defensa adecuada e idónea
A la hora de elegir una determinada defensa debemos tener en cuenta mútiples factores y variadas razones entre las cuales podríamos citar:
-Características físicas de nuestros jugadores (altura, rapidez, etc).
-Situaciones que se dan en los partidos (ventajas en el marcador, desventajas, momentos decisivos, arbitrajes, las faltas personales, etc).
-Contingencias del juego del rival (si trata de llevar el control del balón, si el rival usa muchas penetraciones, si el el rival tiene buenos tiradores, etc).
Como entrenadores debemos analizar y tener en cuenta todas estas matizaciones y a partir de ellas fundamentar nuestra filosofía defensiva, teniendo en cuenta el material humano y técnico que tengamos en nuestros equipos.
Espíritu defensivo
Si importante es saber elegir la defensa adecuada para aún será mas determinante saber inculcar en nuestros jugadores un gran espíritu defensivo, lucha constante, ganas de correr, de sufrir, de sacrificarse, de ser solidarios en el esfuerzo, de ayudar, de bajar a defender, de pelear por el rebote, de mover las piernas, "de bajar el culo", de cerrar los espacios, de estar juntitos y de colaborar todos en esta misión, la suma de todos en defensa nos dará la fortaleza y el santo seña como equipo.
Pero esto no se hace por arte de magia, una cosa es decirlo y otra es hacerlo, será el cada día y la competición lo que nos dará nuestro sello defensivo, la actitud del staff técnico en este sentido tiene una importancia clave y vital. Nunca se renunciará a ello, ya sabéis la típica frase el ataque puede ganar un partido pero la defensa nos hace ganar las competiciones.
Generar confianza, autodeterminación, agresividad, fe, ganas de defender, deseo, concentración, intensidad, coraje, solidaridad,...
¿Para qué defendemos?
Parece una pregunta obvia de fácil respuesta pero a veces no lo tenemos claro, no se trata de ser kamikaces constantes (de ello también se puede aprovechar el contrario), nuestro objetivo fundamental será provocar errores en el contrario.
-No defenderemos para esperar el fallo del contrario (aunque esto a veces nos pueda servir, por ejemplo cuando el rival tiene un día malo en el tiro).
-Defenderemos de forma agresiva pero inteligente, forzando al adversario a jugar de forma distinta a lo habitual, que juega en zonas que no quiera, haciendo que juegue a un ritmo de ataque no sincronizado, obligando al atacante a dar mas botes de los necesarios, llevándolo pegado a las bandas para que estas también ejerzan de defensor, que seamos capaces de sacarlos de su guión establecido, en definitiva forzando que cometan errores y que bajen sus porcentajes de tiro.
-Defenderemos para proteger siempre nuestra línea de fondo y reduciremos al máximo las penetraciones del rival.
-La defensa y el bloqueo del rebote será siempre capital, no seremos nunca cabezas giratorias y controlaremos siempre los segundos tiros del rival (rebotes ofensivos), cerrar y bloquear el rebote será siempre misión de los cinco jugadores que estén en el campo y no sólo de los hombres grandes. Controlar nuestro tablero nos permitirá tener mas posesiones y marcar el "tempus de juego".
-No sobrepasaremos el cupo de faltas de cada periodo (reducimos los tiros libres).
-Intentaremos provocar el mayor número posible de pérdidas al contrario (mas que intentar robar un balón propiciar un mal pase o cualquier otro error).
-No haremos faltas al tirador (evitaremos tiros adicionales).
-Evitaremos que el contrario meta balones interiores (alejar el balón de la botella).
La comunicación defensiva
Si realmente somos un buen equipo defensivo se hace imprescindible hablar en defensa, la comunicación defensiva es una parte vital de cualquier defensa (aunque curiosamente por lo general los jugadores suelen hablar mas en ataque que en defensa, craso error).
-Avisar los bloqueos, avisar los cortes, pedir ayudas, etc, es clave para estar siempre concentrados y mantener la tensión defensiva del equipo.
AUTOR: EDUARDO BURGOS