Creo que hay que quitarse el sombrero ante el Assignia Manresa que por quinto año consecutivo dirige Jaume Ponsarnau, esta tarde ha vencido a un equipo sobre el papel superior y lleno de figuras como es el Bizcaia Bilbao Basket de Fotis Katsikaris.
Su primer tiempo que acabó con un contundente (29-9), dejó en evidencia al equipo bilbaíno que no veía por donde le caía el vendaval de juego que tenía delante y se mostraba incapaz de parar a Justin Doellman que anotó 16 puntos en el primer tiempo y que cayó en las redes de la dirección de juego de Javi Rodríguez que se convirtió casi en el amo del partido (23 de valoración, 7 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias).
Pues bien ante la situación el entrenador griego reaccionó colocando a su equipo en una zona 2-3 y la respuesta táctica que Ponsarnau planteó ante esta defensa os la detallo a continuación:
Ataque a zona 2-3 del Assignia Manresa
El equipo manresano comenzaba sus ataques colocando a sus atacantes en una disposición 1-2-2 muy abiertos y buscaba los puntos débiles (huecos estáticos y dinámicos) de la defensa de una forma fácil y simple como podemos apreciar en los siguientes gráficos:
Diagramas nº1 (El inicio)
El cinco inicial que sacó Manresa estuvo formado por: 1) Javi Rodríguez, 2) Roman Montáñez, 3) Marcus Landry, 4) Justin Doellman y 5) Josh Asseliny en base a ellos vamos a construir el movimiento, los jugadores Marcus Landry y Justin Doellman por sus características podrían intercambiar sus posiciones en este ataque.
Comenzaba el movimiento con un pase del base Javi Rodríguez (nº1) a uno de los aleros, en el gráfico pasa a Román Montáñez (nº2). Tras el pase el base intercambia posición con el alero contrario Marcus Landry (nº3), este intercambio se puede hacer directamente o mediante un bloqueo indirecto al defensor de la parte alta de la zona.
Al mismo tiempo que se realiza el intercambio de posiciones el pívot contrario al lado del balón sube a ocupar posición de poste alto, en el gráfico lo realizaría el jugador nº4 (Justin Doellman).
En el caso de que este jugador recibiese de`primeras podría encarar el aro y finalizar con tiro corto en suspensión, jugar un poste a poste con el pívot nº5 (Josh Asselin) que cortaría bajo el aro o distribuir fuera a uno de los aleros.
Diagrama nº2 (La continuación)
Generalmente el equipo manresano no metía el balón de primeras al poste, tuvo paciencia (una de las cosas que mas me gustaron) y con pocos botes y haciendo un uso adecuado del pase supieron buscar las cosquillas a la defensa.
En el gráfico el jugador nº2 pasa el balón al nº3 y este invierte al nº1, cuando el jugador nº1 metía el balón al poste alto (objetivo principal del ataque), se daban las situaciones de pase que podemos apreciar en el diagrama nº2.
Pase al otro pívot (nº5) bajo aro, pase al alero nº2 o al base nº1 que se hundían a las esquinas y opción de pase al alero nº3 que escogía un lado u otro del ataque.
Si el ataque se iniciaba por el lado contrario se intercambiaban los papeles de los pívots y de los aleros, pero el concepto del movimiento seguía siendo el mismo.
Me gustaría hacer constar que sólo he indicado los nombres de los jugadores que conformaban el cinco inicial, pero en el baloncesto actual ya se sabe que participan otros muchos jugadores que para no ser injusto cito a continuación: Kiern Achara (P), Sergiy Gladyr (A), Pierre Oriola (P), Adam Hanga (P), Alex Hernández (B) y Haukur Palsson (A).
Mi mas sincera enhorabuena a Jaume Ponsarnau y a todos sus hombres que una vez mas demuestran que en Manresa con el trabajo bien hecho, la ilusión, la concentración y la intensidad máxima, se puede ganar a los mas poderosos a pesar de tener menos recursos económicos.