Tenía cierta reticencia a cantar victoria antes de tiempo
pero lo cierto y real es que cuando Serbia se quedó en el camino me alegré
bastante, no porque no pensase que España sería capaz de vencerla sino porque
su tipo de baloncesto habría sido mas aguerrido y quizás menos apropiado para
las características de los jugadores del combinado español.
Podría haber ocurrido que tras la victoria ante Francia,
posiblemente la final anticipada de este Eurobasket, los jugadores españoles se
relajasen y se dejasen llevar por la euforia generalizada que había en torno al
equipo y no respetasen convenientemente a Lituania un rival que en su recorrido
hasta la final se había cargado sucesivamente a Italia y Serbia los dos equipos
que nos habían ganado en la fase previa. Sin embargo leyendo las declaraciones
previas de Sergio Scariolo en las que hacía ver lo difícil que iba a ser el
equipo lituano y la de los jugadores en general y por supuesto de Pau Gasol que
sólo quería pensar en la final y que no le gustaba demasiado oír de todos lo
bueno que era, me tranquilizaron al respecto ya que todos los indicios indicaban
que España saldría concentrada e intensa desde el minuto uno, respetando al
rival, valorándolo y teniéndolo muy en cuenta.
Y como dice el refrán "el
que da primero da dos veces", la salida en tromba del equipo español
con un gran Llull en el ritmo y en las penetraciones, un Rudy Fernández
mostrando su mejor cara, Gasol en su línea de todo el campeonato y un Mirotic
acertado en sus primeros lanzamientos, mas la sorpresa táctica de Sergio
Scariolo metiendo al equipo en zonas 2-3 en cada saque de fondo o banda, puso
en el marcador al término del primer cuarto un 19-8, que reflejaba un absoluto
dominio del juego en todos los aspectos y un colchón de puntos muy importante
para afrontar los tres periodos que aún quedaban.
En el segundo cuarto seguimos con la misma tónica, Sergio
Scariolo que hizo una dirección de partido antológica y que tuvo mucho que ver
en la victoria y en líneas generales en la gestión de todo el campeonato,
aprovechó para hacer mas rotaciones de lo habitual y rápidamente Sergio
Rodríguez, Víctor Claver (en su mejor campeonato y especialmente lúcido en las
ayudas reboteadoras), Felipe Reyes e incluso dio cancha a Fernando San
Emeterio. Las diferencias subieron hasta los 16 puntos, peto lógicamente los
lituanos también saben jugar y poco a poco en una racha de aciertos de
Kalnietis y un triple sobre la bocina al finalizar el primer tiempo redujeron
las diferencias a un 41-33.
Curiosamente a la salida de los vestuarios España certificó
el mejor tercer cuarto del campeonato y con un parcial de 19-10, con un Gasol
que cogió el timón del barco en los momentos más difíciles (por llamarlos de
alguna manera) y especialmente con una defensa intensa e inteligente. A pesar
de la lesión de Rudy Fernández tras recibir un “perchazo” de Jankaunas en un bloqueo directo, el resultado de
(60-43), invitaba al máximo optimismo.
Todo era cuestión de intercambiar canastas y jugar con el
tiempo y el marcador, los lituanos echaron el resto y a pesar de que en cinco
minutos anotamos sólo dos puntos, ellos sólo anotaron seis. Por si las moscas
volvió a la cancha Pau Gasol que gozaba de unos merecidos minutos de descanso y
su vuelta disipó toda posibilidad de reacción lituana, España mantuvo las
diferencias y ganó por (80-63), fue la final soñada que cualquier entrenador desearía
para su equipo, los 27.000 espectadores que abarrotaban el pabellón de Lille se
rindieron a la evidencia y cuando Pau Gasol salió de la cancha faltando 19
segundos le despidieron con una atronadora ovación. Sus 25 puntos, 13 rebotes y
6 asistencias en la final le coronan como el rey del campeonato.
En el cinco ideal estuvieron dos españoles, Pau Gasol que
además ha sido proclamado con total unanimidad como MVP del Europeo (además de
ser el máximo anotador y uno de los mejores reboteadores, si no el mejor) y
Sergio Rodríguez elegido como mejor base (aunque en el partido de hoy no ha
brillado como en él suele ser habitual). Además les acompañaron en el éxito
Nando di Colo (Francia), Maciulis y Valanciunas (Lituania).
Resumiendo España
viajará a Río de Janeiro con el oro colgado en el cuello, con la condición de
campeones de Europa tras ganar en la final a Lituania cerrando así un
campeonato extraordinario que ha conseguido entusiasmar a todo un país.
FICHA TÉCNICA
España 80: Llull
(12), Pau Ribas (5), Rudy Fernández (11), Mirotic (8), Pau Gasol (25) -equipo
inicial-; Sergio Rodríguez (4), Felipe Reyes (8), Claver (7), San Emeterio (-),
Hernángómez (-), Aguilar (-) y Vives (-)
Lituania 63: Kalnietis
(13), Seibutis (13), Maciulis (8), Jankunas (3), Valanciunas (10) -equipo
inicial-; Kavaliauskas (4), Javtokas (-), Gailius (1), Kuzminskas (8) y
Milaknis (3).
Parciales: 19-8,
22-25, 19-10 y 20-20.
Árbitros: Lamonica
(Italia), Belosevic (Serbia) y Ryzhyk (Ucrania). Eliminaron a Valanciunas por faltas
personales (m.36),
Incidencias: Estadio Pierre Mauroy de Lille. 27.372 espectadores.