En las categorías de formación no se suele utilizar el bote de la manera más apropiada, aunque hay muchas posibles aplicaciones del mismo como se indica en el punto anterior podríamos reducirlas fundamentalmente a las tres más importantes
Cuando progresamos mediante el bote y avanzamos en el campo lo podemos aprovechar para realizar ataques rápidos que nos permitan llegar en superioridad numérica, o acabar en situaciones de uno contra uno que son las que más abundan en el baloncesto.
Si con el bote mejoramos el ángulo de pase, conseguiremos poder asistir al compañero para que finalice la acción con éxito.
Si conseguimos generar espacios, nuestra colocación en la ofensiva nos permitirá conseguir buenas penetraciones o doblar y distribuir mejores pases a nuestros compañeros que queden liberados por la acción del defensor.
El bote debe ser entrenado todos los días, si bien según la edad y la categoría de nuestros jugadores se pondrá más o menos énfasis o se entrenará específicamente o de forma global unidos a otros fundamentos (ruedas múltiples).
Dominar el bote no es tan fácil como parece, esto significa tener un control absoluto de la situación que se presente, este dominio permitirá al jugador a demás de no perder el balón manejarlo en la dirección más adecuada como respuesta a los problemas que la defensa nos plantee.
Hay jugadores que se creen dominan este fundamento, pero que después en situaciones de partido cometen errores y pérdidas no previstas, el dominio del balón debe ser en todos los aspectos, bote de protección, bote de velocidad, cambios de dirección y penetraciones a canasta.
Los jugadores cogen la costumbre de nada más atrapar el balón botarlo, eso es un error,
poner el balón rápido en el suelo nos hace perder más opciones del juego, hay que ver el campo ver a los compañeros mejor situados, la posición de los defensores
y sobre todo no perder nunca la posibilidad que nos da al recibir la posición de triple amenaza (poder pasar
, tirar o botar).
El bote es casi como una droga para algunos jugadores, siempre quieren tener el balón, dependen de él, les gusta poseerlo, sin embargo no dan tanta importancia al juego sin balón, hay que hacerles ver que
están muchísimo más tiempo sin balón que con balón.Se puede sacar algunas ventajas con el dribling, pero hay que tener cuidado hoy día con la agresividad de las defensas es fácil que te lleven a una esquina donde hacerte un dos contra uno (trap), por eso hay que enseñar al jugador a
botar por el centro huyendo de las bandas.
A veces es un error abusar tanto del bote, a través de los pases se consigue mayor fluidez del juego y hacemos más difícil el trabajo de la defensa , por ejemplo cuando nos presionan a todo el campo, se sale más fácil sin botes que con ellos, y sin embargo vemos que los jugadores se empeñan una y otra vez en salir botando. Por todo esto insisto en que
hay que usar el bote pero no abusar de ello.
Hay que saber usar las dos manos para botar , pero también hay que saber
usar la mano que no bota para proteger el balón. El movimiento de las piernas en el dribling es importantísimo, es a partir de esto cuando el jugador obtiene ventaja sobre el defensor.
A veces un jugador da más botes de la cuenta sin conseguir ningún objetivo, a todos no habrá pasado que un base está dando 5 ó 6 botes sin buscar ninguna ventaja, pasa el tiempo y al final se nos reducen los segundos de cada ataque,
hay que perseguir algo con el bote, generar espacios, mejorar ángulos ,etc (nunca botar por botar, es un hábito que conviene desterrar).Además si botamos más de la cuenta damos a la defensa tiempo para reaccionar y ajustar sus posiciones a las de los jugadores ofensivos.
Hay botes que hay que darlos de forma especial, por ejemplo:
-
El último bote antes del tiro debe ser alto, para que le llegue a la altura apropiada para la mecánica de tiro y que se haga de forma más rápida.
-
El bote antes de penetrar en uno contra uno debe ser bajo y hacia el frente y con los menos botes posibles para no dar tiempo al defensor a reaccionar y recuperarse.
-El bote en los movimientos de pies
en el pívot debe ser fuerte,corto y rápido para evitar las acciones de ayudas de los hombres pequeños.
Concluiremos diciendo que debemos botar solo lo necesario, buscando objetivos, de forma controlada
e intentando generar un juego fluido y dinámico.
Javier Imbroda exseleccionador español y entrenador de equipos de ACB como Unicaja, Caja San Fernando y Real Madrid, nos habla del uso del dribling en los siguientes términos:
-Hay que
reducir el dribling a lo mínimo porque a veces es casi un arma defensiva para el rival y llega a tener una influencia negativa para el ataque del equipo.
-
Con mi bote siempre quiero crear una situación, si consigo que la defensa esté pendiente de mi acción, mi ataque siempre estará ganando. No debemos preocuparnos de lo que podamos hacer después, sino sacar partido de una situación inmediata.
-Para provocar una situación de amenaza con mi bote, el primer bote quiero darlo con ventaja, para ello necesitaré un trabajo previo para desequilibrar al defensor (fintar),y continuar con un cambio de ritmo (es la forma de ganar ventaja).
-El último bote lo daré cuando tenga definida la acción a realizar (culminar, dar una asistencia, crear superioridad numérica, etc).
Bibliografía: "Tirar, pasar y botar",autor Eduardo Burgos, Editorial Wanceulen.