Ya tenemos finalistas de la Copa del Rey y en ella habrá un equipo andaluz, por segunda vez en su historia el Unicaja de Málaga jugará una final de la Copa del Rey, hoy se ha impuesto con muchas dificultades al MMT Estudiantes que le ha hecho sudar tinta china, aunque al final ganó por (71-78), acabando con el sueño colegial.
Su rival será el TAU de Ivanovic que se ha impuesto por (90-77), al Regal Barcelona de forma clara y con una auténtica exhibición en el segundo teimpo en especial de Rakocevic y Spliter.
TAU CERÁMICA 90-REGAL BARCELONA 77
Con una fórmula tan sencilla como eficaz, el TAU Cerámica volvió a colarse en la final de la Copa del Rey a costa de un Regal FC Barcelona disperso por 77-90, que nunca encontró su propia fórmula. Defensa, Splitter y Rakocevic es la receta que, amenizada con el cerebro de Prigioni, ha convertido a este TAU en (casi) invencible.
En el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid se vivió este viernes un nuevo episodio de su dominio. Constancia y un potente banquillo que ni siquiera hizo falta, y los 45 puntos anotados por la dupla Rako-Tiago.
El Regal Barça de Navarro (19 puntos) aguantó las rachas baskonistas gracias a su calidad individual, pero nunca se sintió dentro del partido y menos después de la ventaja que, aparentemente sin esfuerzo, lograron los de Ivanovic.
El TAU repite pues final e intentará desquitarse mañana de la derrota del año pasado ante el DKV Joventut, mientras que el Regal FC regresa a Barcelona con la sensación de no haber podido competir de tú a tú contra un equipo que, ahora mismo, parece un rodillo. Era el mejor partido de Europa.
Cerca de una hora antes del inicio de la primera semifinal de la Copa, con el parqué aún huérfano de los protagonistas de los "trading cards" (cromos) blaugranas y baskonistas, el ex seleccionador nacional Pepu Hernández, ahora en funciones de comentarista de televisión, estaba expectante: "No hay mejor partido fuera de la NBA. Son el mejor y el segundo mejor de Europa".
Y en el arranque, el mejor encuentro extramuros de la NBA se jugó en dos campos de batalla distintos. El Barcelona apostó por la "pintura". El Tau, se agarró al acierto de Igor Rakocevic, en plena forma, primero, y más tarde a los balones dentro a Thiago Splitter, su otro jugador franquicia. Estadísticas del partido: Pinchad aquí
UNICAJA DE MÁLAGA 78-MMT ESTUDIANTES 71
El Estudiantes atesora una parte importantísima de tan ingente labor, de días, meses, años, tinieblas, luces y mucho sufrimiento que han colocado a España, a sus clubes, a sus equipos nacionales y a los aficionados rojigualdos en la vanguardia del baloncesto del siglo XXI.
En esa raíz filosófica fundamentaron los hombres del Ramiro de Maeztu la aparentemente incoherente paradoja de liderar el marcador al final del primer tiempo (43-41) contra un rival que, de acuerdo al método cartesiano, mejor había ejecutado el trabajo (la valoración malagueña superaba con un buen margen a la estudiantil al llegar al intervalo -37 por 48-). S
in embargo, las cifras también pueden ocultar la cruda verdad. La calificación andaluza primaba porque el Unicaja firmó once tiros libres en trece intentos antes de la tregua. Los madrileños sólo habían aprovechado tres de sus siete visitas a la línea de personal.
En lo demás, el partido respondia a los planes que ellos habían trazado para abrir la puerta de la final. Plan ejecutado con precisión quirúrgica en lo tocante a la defensa sobre el estadounidense Marcus Haislip, el matador oficial del tinglado andaluz (dos puntos en treinta minutos). La reducción del norteamericano latía en el origen de los problemas del Unicaja, enrollado de nuevo en la tela de araña psicológica y táctica que los anfitriones tejieron para sobrevivir al influyente tercer cuarto gracias a diez puntos seguidos del estadounidense Corey Brewer.
La presión pesó mucho en el penúltimo tramo (12-10 de parcial), salvo a Brewer. El base cocinó el 55-51 que figuraba en la salida del cuarto final a fuego lento. Como los buenos guisos. Así que, pese a los primeros retazos de Haislip, el marcador seguía predicando la candidatura colegial cuando Iker Iturbe, impagable en todo lo que hizo cuando levantó las posaderas del banquillo, anotaba el quinto triple en siete intentos (66-67 M.37). El vitoriano, además, bregaba con Haislip en defensa. El checo Martin Rancik le había sacado del choque y el ala-pívot se le encontró en plena efervescencia, deseoso de sacarse la espina de no haber podido hacer más por los suyos en toda la noche.
Haislip reventó, en el mejor sentido del término y, a falta de 1.13 minutos -cuando la estadística ya le atribuía trece tantos al yanqui-, ejercía de juez (68-73). Iturbe, que también se las veía cara a cara en ataque con el estadounidense, sacó otro bombazo vivificante (71-73 a menos de cuarenta segundos para el final) y toda la lucha, toda la entrega, toda la honorabilidad derrochada desde ambos lados de la cancha durante toda la eliminatoria, pasó a manos de Berni Rodríguez: el internacional español fulminó el aro colegial desde el arco (quedaban veintisiete segundos) y el Unicaja cogió el tren para medirse al Tau en la final.
Estadísticas del partido: Pinchad aquí
FUENTES: ACB.COM Y TERRA DEPORTES
TAU CERÁMICA 90-REGAL BARCELONA 77
Con una fórmula tan sencilla como eficaz, el TAU Cerámica volvió a colarse en la final de la Copa del Rey a costa de un Regal FC Barcelona disperso por 77-90, que nunca encontró su propia fórmula. Defensa, Splitter y Rakocevic es la receta que, amenizada con el cerebro de Prigioni, ha convertido a este TAU en (casi) invencible.
En el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid se vivió este viernes un nuevo episodio de su dominio. Constancia y un potente banquillo que ni siquiera hizo falta, y los 45 puntos anotados por la dupla Rako-Tiago.
El Regal Barça de Navarro (19 puntos) aguantó las rachas baskonistas gracias a su calidad individual, pero nunca se sintió dentro del partido y menos después de la ventaja que, aparentemente sin esfuerzo, lograron los de Ivanovic.
El TAU repite pues final e intentará desquitarse mañana de la derrota del año pasado ante el DKV Joventut, mientras que el Regal FC regresa a Barcelona con la sensación de no haber podido competir de tú a tú contra un equipo que, ahora mismo, parece un rodillo. Era el mejor partido de Europa.
Cerca de una hora antes del inicio de la primera semifinal de la Copa, con el parqué aún huérfano de los protagonistas de los "trading cards" (cromos) blaugranas y baskonistas, el ex seleccionador nacional Pepu Hernández, ahora en funciones de comentarista de televisión, estaba expectante: "No hay mejor partido fuera de la NBA. Son el mejor y el segundo mejor de Europa".
Y en el arranque, el mejor encuentro extramuros de la NBA se jugó en dos campos de batalla distintos. El Barcelona apostó por la "pintura". El Tau, se agarró al acierto de Igor Rakocevic, en plena forma, primero, y más tarde a los balones dentro a Thiago Splitter, su otro jugador franquicia. Estadísticas del partido: Pinchad aquí
UNICAJA DE MÁLAGA 78-MMT ESTUDIANTES 71
El Estudiantes atesora una parte importantísima de tan ingente labor, de días, meses, años, tinieblas, luces y mucho sufrimiento que han colocado a España, a sus clubes, a sus equipos nacionales y a los aficionados rojigualdos en la vanguardia del baloncesto del siglo XXI.
En esa raíz filosófica fundamentaron los hombres del Ramiro de Maeztu la aparentemente incoherente paradoja de liderar el marcador al final del primer tiempo (43-41) contra un rival que, de acuerdo al método cartesiano, mejor había ejecutado el trabajo (la valoración malagueña superaba con un buen margen a la estudiantil al llegar al intervalo -37 por 48-). S
in embargo, las cifras también pueden ocultar la cruda verdad. La calificación andaluza primaba porque el Unicaja firmó once tiros libres en trece intentos antes de la tregua. Los madrileños sólo habían aprovechado tres de sus siete visitas a la línea de personal.
En lo demás, el partido respondia a los planes que ellos habían trazado para abrir la puerta de la final. Plan ejecutado con precisión quirúrgica en lo tocante a la defensa sobre el estadounidense Marcus Haislip, el matador oficial del tinglado andaluz (dos puntos en treinta minutos). La reducción del norteamericano latía en el origen de los problemas del Unicaja, enrollado de nuevo en la tela de araña psicológica y táctica que los anfitriones tejieron para sobrevivir al influyente tercer cuarto gracias a diez puntos seguidos del estadounidense Corey Brewer.
La presión pesó mucho en el penúltimo tramo (12-10 de parcial), salvo a Brewer. El base cocinó el 55-51 que figuraba en la salida del cuarto final a fuego lento. Como los buenos guisos. Así que, pese a los primeros retazos de Haislip, el marcador seguía predicando la candidatura colegial cuando Iker Iturbe, impagable en todo lo que hizo cuando levantó las posaderas del banquillo, anotaba el quinto triple en siete intentos (66-67 M.37). El vitoriano, además, bregaba con Haislip en defensa. El checo Martin Rancik le había sacado del choque y el ala-pívot se le encontró en plena efervescencia, deseoso de sacarse la espina de no haber podido hacer más por los suyos en toda la noche.
Haislip reventó, en el mejor sentido del término y, a falta de 1.13 minutos -cuando la estadística ya le atribuía trece tantos al yanqui-, ejercía de juez (68-73). Iturbe, que también se las veía cara a cara en ataque con el estadounidense, sacó otro bombazo vivificante (71-73 a menos de cuarenta segundos para el final) y toda la lucha, toda la entrega, toda la honorabilidad derrochada desde ambos lados de la cancha durante toda la eliminatoria, pasó a manos de Berni Rodríguez: el internacional español fulminó el aro colegial desde el arco (quedaban veintisiete segundos) y el Unicaja cogió el tren para medirse al Tau en la final.
Estadísticas del partido: Pinchad aquí
FUENTES: ACB.COM Y TERRA DEPORTES