El Quesos Cerrato Palencia ha conquistado su primer título oficial en la Adecco Oro en una noche casi perfecta. Los de Natxo Lezkano impusieron su estilo ante un RiIbeira Sacra Breogán que nada pudo hacer ante un equipo llevado en volandas por su público para que Urko Otegui levantara la Copa Príncipe 2015.
La noche soñada por
el Quesos Cerrato Palencia se convirtió en la más dulce realidad sobre la
cancha de un polideportivo Marta Domínguez vestido de gala para llevar a su
equipo en volandas hacia el triunfo. En una noche casi perfecta, los de Natxo
Lezkano supieron manejar los tempos de partido para anular los puntos fuertes
de un Ribeira Sacra que peleó contra los elementos hasta el bocinazo final.
De este modo, el
Quesos Cerrato Palencia conquista el doblete de Copas Adecco con un título que
será recordado para siempre como su estreno en el palmarés de una Adecco Oro en
la que les espera ahora un objetivo aún más ambicioso en la carrera por el ascenso
a la Liga Endesa.
El acierto exterior propulsa al
Quesos Cerrato
Con los pesos
pesados en sus respectivos quintetos tanto Natxo Lezkano como Lisardo
Gómez arriesgaron desde el principio dejando atrás a los diferentes
problemas físicos que habían lastrado a ambos equipos durante los últimos días.
Sin Cortaberría y Samb -únicas bajas- el
Ribeira Sacra comenzó el partido muy mentalizado, dispuesto a demostrar que su
abultada derrota en Palencia durante el encuentro liguero había sigo un mero
accidente. Las primeras penetraciones sirvieron a los visitantes para hacerse
con las primeras rentas pero Quesos Cerrato tuvo muy claro cuál debía ser su
lugar en ataque sorprendiendo con un triple de Guille Justo primero
y con un parcial de 13-0 después a través de los primeros puntos de su dupla
interior (16-6). El tiempo muerto solicitado por Lisardo Gómezinstantes
antes no terminó de clarificar las ideas de un Ribeira Sacra que topaba una y
otra vez con la inamovible defensa palentina para marcharse al entreacto con
una desventaja que no entraba en sus planes iniciales (21-10).
Solidez defensiva para
seguir creciendo
Regresó a cancha el
Ribeira Sacra Breogán con el objetivo prioritario de vencer a las inseguridades
generadas en ataque durante un primer periodo de dudas pero el tempranero
triple de Quinn McDowell desde la esquina no ayudó a los
visitantes a lograr su meta más inmediata. El acierto en el tiro siguió sin
acompañar al conjunto celeste trasladando su momento más complicado hasta ese
momento a la defensa donde Tomas Hampl aprovecho para hacerse
con un importante rebote ofensivo con el que generar nuevos puntos para su
equipo. El capitán Dani López asumió galones para tratar de
iluminar a su equipo pero su compañero de equipo en la Copa ganada en Lugo en
el año 2008 no tardó en solicitar su particular dosis de protagonismo. De este
modo, Roger Fornas ayudó a los suyos tanto en anotación como
en un rebote del que se hizo dueño en ambos aros para doblegar a su rival
(31-14). Con su segundo tiempo muerto Lisardo Gómez trató de
reconducir a un equipo en el que un tocado Álex Llorca no
terminó de sentirse del todo cómodo ante la intensa defensa rival lo que, unido
a los primeros cambios celestes, permitió que los locales siguieran engrosando
las diferencias con Guille Justo on fire desde el
perímetro (36-26). Un pequeño parcial de 2-7 permitió que lloviera un poco
menos al descanso para un Ribeira Sacra al que esperaba un intenso trabajo de
cara al segundo tiempo (38-23).
Edwards devuelve la fe al Ribeira
Sacra Breogán
Tras el paso por
vestuarios, Ribeira Sacra Breogán confió su juego a un Dani López que
buscó el aro una y otra vez en una noche en la que, sin embargo, las canastas
no estaban del lado de su equipo. Los primeros puntos gallegos encontraros
rápida respuestas a través del juego del playmaker rival, un Xavi
Forcada muy crecido y que permitió, con un triple liberado, que su
equipo regresara de nuevo a la veintena de ventaja (50-29). El técnico
visitante solicitó un nuevo parón en el que la palabra “tranquilidad” fue la
más repetida a unos jugadores para los que el encuentro comenzó a complicarse.
Con los palentinos cargándose de faltas en defensa, el oxígeno aportado porUrko
Otegui en ataque con un tiro que desató toda su expresividad fue
determinante a la hora de aguantar el arreón de un Brandon Edwards capaz
de volar por encima de los aros y sorprender desde el 6,75. El norteamericano
hizo creer a su equipo colocándose a 13 puntos para obligar a Natxo Lezkano a
solicitar un tiempo muerto en el que pidió a sus jugadores que no tiraran el
trabajo realizado gasta ese momento (57-46).
Guille Justo y Forcada se
saca la Copa de la chistera
Pero el peor
momento para Quesos Cerrato estaba aún por llegar. Como no podía ser de otro
modo, Brandon Edwars tiró de calidad individual para anotar dos triples
consecutivos que metieron el miedo en el cuerpo al equipo local. Su acierto,
unido a la cuarta falta de Urko Otegui llevaron a Natxo Lezkano a parar el
partido con los gallegos a tan sólo 5 puntos (59-54). Pero Guille Justo no
estaba dispuesto a desperdiciar su gran noche con un certero triple que
precedió a otro de Xavi Forcada con el que incrementar de nuevo las diferencias
para hacer estallas las gradas. Con su dupla de obreros formada por Dani López
y Álex Llorca los gallegos mantuvieron intactas sus opciones pero la
experiencia y las ganas de ganar del Quesos Cerrato Palencia terminaron por
dejar el título en casa para los locales. El partido concluía y el pabellón se
convirtió en una fiesta (78-69).
AREA DE COMUNICACION FEB (Pablo Romero)