Os dejo unas breves pinceladas del mismo y os pongo el enlace a la noticia completa**:
Principales cambios en cuanto al juego en sí:Defensas más cerradas. Aunque los grandes tiradores seguirán metiendo sin demasiados problemas, los que no lleguen a ese nivel de puntería tirarán mucho menos, lo que, en contra de lo que parece que persigue la nueva norma, hará que el juego se cierre más en lugar de abrirse. El famoso '4 abierto' volverá a ser un poco un bicho raro pero, eso sí, los interiores capaces de mantener un gran acierto en el triple con la nueva línea se revalorizarán, cosa que agradecerá su cuenta corriente.Más push y menos perseguir en los bloqueos directos centrales. Salvo en los casos de excepcionales triplistas cambiará radicalmente la forma de defender el pick&roll central. Mientras que hasta ahora, a poco que el exterior fuera capaz de tirar algo, era muy frecuente defenderlo persiguiendo y haciendo flash, a partir de ahora lo más frecuente será hacer push (el defensor del bloqueador se pega, empujando un poco, a su par para facilitar al exterior que defiende pasar por detrás). Ello debería dificultar, a su vez, las continuaciones de los pívots, con lo que el pick&roll tenderá a ser menos efectivo y, por tanto, ir viéndose menos o, como poco, dejar de ser el recurso estrella del juego en ACB.
Es decir, salvo con los grandes killers, las defensas se echarán más atrás y serán más permisivas con el tiro, invitarán a tirar cerrándose más, con lo que podrán hacer más ayudas sobre el juego interior y bastantes menos sobre el juego exterior. Por tanto, no sólo no se verá más juego interior, sino que puede que aún menos que hasta ahora.
Problemas con las esquinas. En las esquinas la distancia del triple será ahora de 6,60 m. pero eso no facilitará que haya más tiros desde la esquina, sino todo lo contrario, pues ahora en esa franja paralela a la línea de banda sólo habrá 90 cm. para poder tirar de tres puntos, con lo que será muy difícil hacer algo sin pisar una de las dos líneas, la de triple o la de banda. De hecho, este año en LEB Oro los árbitros se han hartado de pitar fuera de banda por pisar la línea cerca de la esquina.



Los almerienses buscarán el título ante su afición, en un triunfo que de paso les permitiría incluir su nombre en el palmarés del torneo. Hasta el momento, seis equipos se han hecho con un torneo que se disputa ininterrumpidamente desde 2001. En esa primera edición, disputada en Córdoba, el vencedor fue el equipo anfitrión, el Cajasur, que se ganó el derecho a disputar la fase final ante los equipos de la ACB que se celebró en Granada.
Sólo permanecen tres jugadores del año anterior los cordobeses Luis César Garrido y Manolo Camacho y el escolta madrileño afincado en Andújar, David Suka.




