Ayer por primera vez durante esta temporada vi jugar al Smurfit Kappa Bball Córdoba en partido oficial, aunque también lo pude ver en la final de La Copa Diputación de Córdoba ante el C.V del Carmen. El rival que tenía en frente la escuadra cordobesa era el todopoderoso Baloncesto Coín, un equipo que llegaba con la vitola de haber ascendido el año anterior por la vía deportiva a LEB Plata y sin poderlo ratificar económicamente y que mantenía su bloque principal incluso con refuerzos como Pablo Movilla, José Alberto Jiménez, etc, que se presentaba en Vista Alegre como líder imbatido y que a priori era claro favorito para ganar el partido.
Sin embargo esto no fue así, principalmente porque se encontró delante un equipo "valiente y decidido" como le pedía su entrenador Rafa Sanz en la previa, que salió a por todas y que en todo momento dió la sensación de que creía en sus argumentos y en sus posibilidades.
Pero intentaré ir paso a paso para desgranar mi opinión del Bball Córdoba en la noche de ayer:
1) Un cinco inical muy claramente definido
José Antonio Medina como base, Adolfo Vega y Arturo López como aleros y Matt Devine y Cheick Sekou Conde como pívots, conformaron un quitento que jugaron la base fundamental de los minutos de juego del equipo cordobés. Liderados por el guineano Sekou (29 puntos y MVP del partido) y por la actuación destacada del base José Antonio Medina en los momentos decisivos del partido y de un Arturo López que anotó tiros libres de calidad en los momentos cumbre y determinantes. Buen trabajo de intendencia de Matt Devine aportando en el rebote y anotando un triple psicológico que encauzó el sprint final del equipo y un Adolfo Vega que cada vez está creciendo mas en defensa y aportando signos de evidente madurez en el juego.
2) Fé en los jóvenes
Rafa Sanz demostró que su idea de formar y hacer progresar a los jóvenes la va a llevar a cabo con valentía como en el suele ser habitual. Ayer utilizó a cuatro jóvenes, Carlos García, José Manuel Gutiérrrez, Ángel López y al rambleño José Antonio Moreno. Ninguno de ellos defraudó supieron complementar a los veteranos, dosificar sus esfuerzos y estar a la altura del partido, muy en especial Carlos García en labores defensivas y de variar el ritmo junto a un Ángel López que aportó detalles y canastas interesantes.
3) Un estilo definido
Defensa inteligente, fuerte, constante y solidaria
La escasez de rotaciones no permite al equipo cordobés hacer una defensa "Kamikaze", pero no por ello el equipo dejó de defender con intensidad y ese es el verdadero mérito del equipo del Bball, se defendió con inteligencia, se aplicaron bien todos los conceptos defensivos, se dosificaron esfuezos sin gastar energias inútiles, defendieron los cinco a la vez, se estaba atentos a las ayudas, se recuperaba a tiempo y se cerró muy bien el rebote, como resultado inmediato se pudo construir el juego de ataque desde la defensa.
Nunca se renunció al contraataque
Aunque el partido no estuvo lleno de acciones de contraataques y transiciones, el equipo cordobés nunca renunció a salir con velocidad y decisión cada vez que encontró el menor resquicio, especialmente con la aparición de Carlos García.
No se especulaba en ataque, sin miedo a la hora de tirar
Importante fue observar la decisión de todos los jugadores cordobeses en ataque incluidos los jóvenes, nadie se cortó ni especuló. si había que tirar mejor a la primera opción buena que se presentara, que rizar el rizo y tirar al final de la posesión de cualquier manera, en este aspecto José Antonio Medina y el guineano Skou Conde llevaron la batuta.
Jugadas rápidas y con objetivos
Los sistemas de ataque del equipo cordobés fueron sencillos y poco enrevesados, la mayoría de las veces con desenlace rápido y con objetivos claros. Salidas de los aleros en rombo, generar a partir del poste bajo, cortes de los aleros por línea de fondo, bloqueos en diagonal, el que bloquea es bloqueado y movimientos pensados en función de las características de los jugadores para que explotasen sus mejores virtudes.
Roles asumidos
Dió la impresión que cada jugador tenía muy bien asumido su rol y el papel a cumplir dentro del equipo, dos líderes claros José Anronio Medina en el perímetro y Cheick Sekou en la pintura, dos lugartenientes de lujo en las figuras de Arturo López y Adolfo Vega y un jefe de intendencia como Matt Devine con una labor tan necesaria como imprescindible. Un Carlos Garcia para cambiar el ritmo y agobiar al base rival y el resto de jóvenes para ayudar y refrescar a sus compañersos..
4) Una muy buena dirección de equipo
Sin ánimo de que suene a peloteo, cuando tenga que criticar lo haré, la dirección de Rafa Sanz para mi fue modélica y tuvo una influencia importante en el desarrollo del partido.
-La aparición de Carlos García
El Smurfit Kappa Bball Córdoba empezó el partido algo dormido, José Antonio Medina tardó algo en entrar en juego y por ello llegó la primera gran decisión del entrenador cordobés, cambió al base jerezano y apareció el joven Carlos Garcia que cambió el ritmo del partido controlado que proponía Coín, defendió fuerte al base rival, hizo correr a su equipo y el partido se igualó tras la desventaja inicial.
-Las rotaciones
En este sentido el entrenador cordobés jugó sus bazas con maestría, dío el descanso necesario a sus piezas fundamentales, no le tembló el pulso dando cancha a los jóvenes y llegó con su cinco inicial completo, vivito y coleando a los momentos críticos y decisivos del partido.
El cambio a zona 2-3
En el inicio del tercer cuarto Rafa Sanz dispuso una zona 2-3 de ajuste, que sorprendió al equipo malagueño y que le costó atacarla, fue una zona activa solidaria, con los cinco hombres moviéndose a la vez, saltando a cada pase y que obligaba al rival a tirar en posiciones poco habituales y casi siempre con un defensor encima. Fue otra de las grandes decisiones tácticas que influyeron en el partido.
-El aprovechamiento de los recursos humanos
Controlar las emociones de una plantilla es harto complicado, pero si encima se les motiva se aprovecha sus cualidades y se les saca partido a sus características y capacidades, está claro que el rendimiento puede llegar a lo mas alto y eso es lo que hizo el entrenador cordobés con su plantilla, hasta el extremo que eclipsó a la potente plantilla del rivel que a priori contaba con mas recursos, nombres y rotaciones, pero que a la hora de la verdad no se hicieron notar.
Resumiendo me gustó mucho el equipo del Smurfit Kappa Bball cordobés, gran victoria y si la cosa sigue así seguro que llegarán muchas mas, ¡Enhorabuena!