Unicaja de Málaga cumplió con su condición de favorito conquistando su 17ª Copa de Andalucía tras vencer por un ajustado (80-77) a un Covirán Granada muy combativo y luchador, que dispuso de un último tiro en las manos de Gian Louis Capell para llevar el partido a la prórroga.
Vista Alegre se vistió de gala para disfrutar del mejor baloncesto de Andalucía, unos 3.500 espectadores con nutrida presencia de aficionados tanto de Málaga como Granada que no se cansaron de animar con sus cánticos, dieron un especial colorido y un ambiente inmejorable, en un partido que no defraudó a nadie pese a que ambos equipos están en plena pretemporada y con muchas cosas que ajustar y conexionar.
(Foto de A.J. González, extraída del Diario Córdoba)
Unicaja se presentó con las sensibles bajas de Alberto Díaz, Melvin Ejim y Nihad Djedovic, pero aún así, marcó el ritmo inicial del partido fundamentalmente por su mayor intensidad de inicio, la fluidez en la circulación del balón y su acierto exterior. Muy enchufados los de Ibón Navarro en el comienzo de partido obligaron a Pablo Pin a pedir su primer tiempo a falta de 4:04 minutos para acabar el primer cuarto, con el electrónico indicando un marcador de (17-8). Las rotaciones clásicas de los equipos no consiguieron cambiar la dinámica y Unicaja mandaba (25-15) en el primer cuarto.
Subió bastante la agresividad en defensa del equipo nazarí y se notó bastante en el inicio del segundo cuarto, obligando al técnico malagueño a pedir tiempo muerto con (33-31) en el marcador y respondiendo tras un saque de banda con rotación circular más un bloqueo ciego, con un triple inmediato de Tyler Kalinoski y mucha más velocidad en sus transiciones y ataques, con un Kendrick Perry que entró en ebullición con dos triples consecutivos, llevando el partido al descanso con un (49-41). Los diez triples conseguidos por el equipo malagueño en esta primera mitad, marcaban la diferencia.
En el tercer cuarto ninguno de los dos equipos estaban dispuestos a regalar nada, los malagueños luchaban por ampliar su ventaja y los de Pablo Pin, muy combativos y peleones en todo momento, luchaban con denuedo por igualar su desventaja. Fue un cuarto de un toma y daca continuo por ambas partes, de intercambio continuo de canastas, con un nivel defensivo bastante elevado por ambas partes pese a estar en pretemporada y con el despertar en el tiro exterior del Covirán Granada, que obligaba a la defensa malagueña a abrirse. Unicaja se metió en bonus muy pronto, pero aún así la diferencia en el electrónico se mantenía, (68-61).
En el último cuarto, con Kendrick Perry tomando aire en el banquillo sustituido por el joven Trujillo para darle descanso, los granadinos se metieron de lleno en el partido poniendo el marcador en (68-66). Reaccionó Ibón Navarro metiendo en pista a Perry y Kalinoski, el ritmo pasó a ser trepidante con ataques muy rápidos de ida y vuelta, los triples de Scott Bamforth (4/6) hicieron estragos y el partido se puso en un (76-75) a falta de 2:05 minutos, todo podía pasar, los pequeños detalles y el control de la ansiedad se tornaban determinantes en el desenlace del choque.
Un triple del pivot malagueño Dylan Osettkowski llevó el tanteo a (79-75) a falta de 1:19, tras las típicas jugadas finales de situaciones de últimos segundos de uno y otro equipo, el partido se fue a (80-77) a falta de 20 segundos con posesión para el equipo de Pablo Pin. Tras el tiempo muerto consiguiente, Ibón Navarro puso en defensa un pivot y cuatro exteriores, los malagueños defendieron sin buscar la falta y el Covirán Granada dispuso de un triple esquinado para forzar la prórroga pero no entró y la Copa Andalucía se fue para Málaga.
Así vi a los equipos
Me gustaron muchos detalles de ambos equipos, lo que mas me llamó la atención es que ambos están a un muy buen ritmo teniendo en cuenta el momento de pretemporada típico de estas fechas. Ambos equipos defendieron los cuarenta minutos en individual, eché en falta algo de más presión a los bases, en cierta medida se les dejó maniobrar salvo en momentos puntuales de partido, especialmente en los minutos finales de partido y de periodo.
Unicaja llevó la batuta durante todo el partido, siendo ligeramente superior en todos los aspectos estadísticos del juego, rebotes, asistencias, menos balones perdidos, porcentaje exterior, etc. Sin embargo Granada nunca le perdió la cara al partido, demostró con su carácter aguerrido y sus buenas tomas de decisiones en ataque, que están empezando a construir un buen equipo pese a tantos nuevos fichajes llegados, me da la impresión que han acertado de cara su tercera temporada consecutiva en ACB de la mano de un Pablo Pin que tiene una trayectoria espectacular al mando de este equipo desde la Primera Nacional a la cúspide del baloncesto español, mérito extraordinario e inigualable el de este excelente entrenador granadino.
El trabajo de Ibón Navarro con Unicaja no lo voy a descubrir yo, reconocido por todo el baloncesto ha llevado a una cota de excelencia del equipo malagueño extraordinaria, supongo y espero que esta temporada lo volverá a demostrar. En el partido de ayer me gustaron en especial además de la buena dinámica defensiva del equipo, tres aspectos ofensivos claramente diferenciados: 1) el arte de sacar rápido tras canasta recibida sin dejar formar la defensa al rival, 2) La paciencia en buscar los buenos tiros, con muy buenas y estudiadas salidas de indirectos y mucha paciencia para buscar un pase más y 3) La calidad, velocidad y precisión de sus pases, con mucha repercusión en el acierto de sus lanzamientos triples.
Los más destacados
En Unicaja bajo mi punto de vista los jugadores que más brillaron fueron Kendrick Perry a la postre MVP del partido (12 puntos-4/5 en triples, 6 asistencias y 16 de valoración) y David Kravish determinante en ataque merced a su excelente mano (17 puntos, 3/6 en tiros de dos, 2/2 en triples y 5/5 en triples), con momentos puntuales interesantes de Osettkowski, Kalinoski, Carter y Taylor.
En el Covirán Granada, Amine Noua fue su jugador mas valioso (15 puntos, 4 rebotes y 15 de valoración), seguido del polivalente Gian Clavell (13 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias y 12 de valoración), Scott Bamborth se mostró muy acertado desde el triple y el pívot Jacob Wiley despertó notablemente en el segundo tiempo.´
Árbitros
El partido fue dirigido por tres colegiados andaluces de ACB: Alberto Sánchez Sixto y Joaquín García "Quini" y el cordobés Antonio Conde, muy ovacionado en la presentación del partido por sus paisanos por su éxito como árbitro principal en la final de los Juegos olímpicos.
Estadísticas del partido