Las claves de la victoria de un Valencia Basket "IMPERIAL" ante el Real Madrid

Antes que nada me gustaría dejar claro que cada partido de baloncesto es un mundo, que un partido malo puede darse en cualquier momento igual que "el partido perfecto" puede salir cuando menos lo esperes, así que el análisis que a continuación realizaré es cuestión puramente puntual, sería por mi parte demasiado atrevimiento hacer eso extensivo mis comentarios a una temporada e incluso a una trayectoria.

                                               (Laberiey y Tobey luchando por un rebote, EFE)
Centrándonos puramente en el partido de la Eurliga que se jugó ayer, me gustaría incidir mas en los méritos del Valencia Basket que en los deméritos del Real Madrid y en ese sentido me gustaría incidir en lo siguiente:

1) A nivel táctico, Jaume Posarnau  y su staff técnico plantearon un partido de forma excepcional, tanto a nivel defensivo como ofensivo, funciones claramente definidas y un plan de partido que se llevó a rajatabla de principio a fin con total éxito.   

2) Ese plan táctico a mi juicio se fundamentó fundamentalmente en cinco aspectos: 1) Controlar a Facundo Campazzo (no fue el mismo e incluso parecía que se le agotaban las ideas recurriendo demasiadas veces al 1c1), 2) Sacar a Eddy Tabares de la botella y de su zona de confort obligándole a salir fuera (estuvo perdido en ese aspecto), 3) Abrir el campo y crear un spacing que incomodara las ayudas y rotaciones del Real Madrid y 5) Control del juego de distribución del poste bajo de Gaby Deck (excelente partido de Kalinic) 4) Imponer el ritmo de juego del partido, cargando mucho el rebote ofensivo y no dejando correr al equipo de Pablo Laso.

3) Dejando claro que Pablo Laso es un grandísimo entrenador y tiene alrededor un staff técnico de primera categoría, bajo mi punto de vista ayer no supieron encontrar el antídoto adecuado a lo que le planteaba táticamente el equipo taronja. 

Tabares en ataque funcionaba pero en defensa estaba descolocado, su tendencia natural a quedarse dentro de la zona era una y otra vez explotada por divisiones y penetraciones de los exteriores valencianos (muy bien en ese sentido Prepelic magnífico asistiendo a los pivots), para doblar balones a la parte alta del perímetro donde especiamente Dubljevic se puso las botas (6/9 en triples). 

Además cuando Tabares se atrevía a salir fuera, el spacing pensado con un campo muy abierto permitía a los exteriores valencianos penetrar a canasta y busca situaciones de posteo en 1c1 que también plantearon problemas (muy listos Kalinic, San Emeterio, etc).

Eché de menos alguna reacción desde el banquillo blanco en este aspecto que nunca llegó, posiblemente el cambio a defensa zonal del último periodo cuando prácticamente el partido ya estaba decidido llegó algo tarde o haberse planteado un sistema de cambios y rotaciones para ayudar a Tabares, o haber dado algo mas de descanso a Tabares en momentos en los que Dubljevic iba al banco, o cualquier otroa plan B o C se echaron de menos.

4) El juego cohesionado, equilibrado y con las ideas claras del equipo de Posarnau rompió los esquemas de los jugadores del equipo blanco hasta el extremo de conseguir que cada uno hiciera la guerra por su cuenta y pareciera un equipo desorganizado, sin patrón de juego y sin sistemas esctructurados de ataque (que por supuesto no es así, pero ayer si que lo parecía). Tiros sin venir a cuento, faltas personales absurdas y de frustación evitables innecesarias, excesivamente pendientes del arbitraje, etc, etc. 

No se jugaba en equipo y no se compartía el balón, como dije antes algunos jugadores hacian la guerra por su cuenta aunque creo que no creo que sea por egoismo de los jugadores como pudiera parecer, mas bien por impotencia de no saber que hacer ante la defensa valenciana y en su afán de querer recortar las diferencias que poco a poco iba consiguiendo el rival, he vivido situaciones de ese tipo entrnando a mis equipos y en momentos así suele ocurrir, peor sería que eso se diera en mas partidos, en ese caso ya si que habría que mirarlo y tomar medidas como las que Pablo Laso en sus declaraciones ha dado a entender.

5) Los jugadores tampoco ayudaron demasiado a Pablo Laso, el rendimiento de algunos titulares y de otros que formaron parte de las rotaciones dejaron mucho que desear, jugadores como Randolph, Deck, Llull, etc, estuvieron muy lejos de su nivel. 

También sorprendió bastante que jugadores como Jayce Carroll no jugara ni un solo minuto, no se si Laprovittola estaba lesionado (si no lo estaba, Carlos Alocén parece que va por delante en las rotaciones y el zaragozano tampoco aportó demasiado), jugadores como Taylor y Felipe Reyes ni siquieran fueron de la partida, Abalde no se parece nada al jugador de Valencia, Causeur apenas seis minutos en pista, Rudy muchos minutos olvidado, Garuba aún tiene que mejorar mucho,  Thompkins  no sólo se debe limitar a tirar, en fin no quiero echar mas leña sobre el árbol caído, pero lo cierto y real es que el equipo que dirige Pablo Laso no se parecía en nada ayer a la imagen que habitualmente suele dar.

6) Un Valencia imperial, el equipo de Jaume Posarnau es un excelente equipo con mimbres suficientes para ganar a cualquier equipo europeo, muy bien dirigido desde el blanco, implicando y dando cabida a todas las rotaciones, participando todos los jugadores en el trabajo colectivo ofensivo y defensivo, sabiendo sacrificarse y sufrir y lo que es muy importante compartiendo siempre el balón. 

Tres bases diferentes y complementarios: Van Rossom, Vives y Hermannsson; un escolta mas que interesante Prepelic que demostró que es algo mas que un tirador; dos aleros altos Kañinic y San Emeterio con mucha experiencia y tiros pegados que siempre saben lo que buscan y cuatro pívots con muy buena mano para abrir el campo, ir al rebote y con buen juego de poste bajo como Dubljevic, Labeyrye, Tobey y Derrick Williams.

En definitiva gran partido del Valencia Basket, que dominó claramente todas las facetas del juego y que ayer dio todo un recital de juego en su partido ante un Real Madrid que no estuvo en ningún momento al nivel adecuado.