El Tau es la esencia de la Supercopa y disputará su cuarta final en los cinco años del torneo que estrena la temporada, pues tan sólo el Barcelona ha logrado, además de los baskonistas, el título de la Supercopa en la primera edición que se jugó en Málaga, después de un partido propio de pretemporada más que de competición oficial y en el que el Barcelona pagó sus errores en los tres últimos minutos.
Hasta ese punto, el Barcelona gestionaba una renta de 3 puntos (67-70), todo un tesoro en un parcial en el que en siete minutos el Tau sólo había anotado un punto de tiro libre de Pete Mickeal, pero poco le importó. Una patada de impotencia a un soporte publicitario de Ivanovic, un tiempo muerto, una canasta de Rakocevic y un triple de McDonald le colocaron por delante (72-70) en el instante preciso.
Con 15 segundos por jugar, Navarro asumió el rol protagonista que no tuvo en Memphis, aunque erró a aro pasado y no pudo forzar la prórroga. Otro tiro libre de Rakocevic sentenció a los blaugrana, incapaces de aprovechar los 4,9 segundos que le quedaron para lograr la gesta de restar los tres puntos (73-70) que se quedaron en el marcador definitivo de la semifinal que abría la Supercopa.
Es que es tiempo de ajustes. La Supercopa abre el telón del curso y, por ello, el Tau de Dusko Ivanovic, de nuevo en casa después de dos campañas y media en Barcelona, no fue aún el Tau, el campeón de Liga, el equipo hecho a la medida de la Copa, de la Supercopa, tres veces campeón, y el Barcelona de Xavi Pascual, de 'Chichi' Creus, tampoco ha engrasado aún su nueva maquinaria, a pesar del regreso del hijo pródigo Juan Carlos Navarro o el fichaje estrella del ex pívot del CSKA David Andersen.
Y como estamos en ese período de rodaje, el Tau empezó como un ciclón desde el perímetro, cuando le hizo falta, y en la pintura, con Will McDonald, el protagonista de la edición pasada en Bilbao por el asunto de las "bodas exprés", al que nadie le podía parar, ni Ersan Ilyasova, primero, ni siquiera Andersen más tarde. Por ello, y por los fallos continuos en el tiro del Regal Barça, los baskonistas abrieron un agujero (21-9) preocupante al final (min. 9) del primer cuarto.
El subcampeón de la Lliga Catalana, la única derrota (contra la Penya) en toda la pretemporada para los culés, fue más agresivo en la defensa en el arranque del segundo cuarto y, con Navarro e Ilyasova, una versión la suya más cercana a su coste cercano a los 2 millones de euros, casi neutralizó la desventaja al descanso (43-41), mientras McDonald cogía un poco de aliento en el banco.
El tercer cuarto fue nulo. Las ventajas eran mínimas, pues el Barça estaba bien en defensa, Andersen empezaba a carburar e Ilyasova y Navarro también para equilibrar los tantos de Rakocevic y McDonald. Con empate a 66 se llegó al fin del período y se abrió un tiempo de sequía para ambos equipos. Un punto de Mickeal, dos canastas de Navarro al contraataque y el desenlace ya contado.
El Tau sólo anotó 7 puntos y ganó. Ganó Ivanovic a su ex Barça, que ha perdido los dos partidos más importantes de pretemporada: la final de la Lliga Catalana y hoy, la semifinal de la Supercopa. Por contra, el equipo vitoriano alarga la racha que acabó con el campeonato de Liga y amenaza mañana con empezar con tan buen pie este año. A Querejeta no le van a caber tanto trofeo en la sala del Buesa Arena.
CAI ZARAGOZA 96-DKV JOVENTUT 71
Un triple de Green dio la delantera (35-33) al equipo de Curro Segura, que empezó a creérselo y en el que Quinteros entraba hasta la cocina del DKV sin ningún complejo LEB. El alero argentino, bronce en Pekín, fue a partir de entonces el faro de los maños para elevar la moral de la grada, ya totalmente encendida y con una fe ciega en la victoria del club que se ausentó doce años de donde nunca tuvo que faltar.
El segundo cuarto fue abrumadoramente para el CAI, que ahogaba al Joventut y no le dejaba anotar, le endosaba un parcial de 23-11 y se marchaba al descanso (50-44) con la sensación de que la gesta era posible.
Los jugadores maños salieron con una marcha más a la vuelta de los vestuarios. Más 9 (53-44), mÁs 11 (57-46), más 18 (64-48). El CAI era una máquina de producir puntos sin que los pupilos de Sito Alonso pudieran hacer nada para evitarlo. Una zona verdinegra y un parcial de 0-7 para el DKV fue el último canto de sirena del campeón copero. Quinteros, con dos triples consecutivos, resolvió la minicrisis maña y volvió a alejar (70-57) a los locales.
El DKV no tuvo capacidad de devolver ese golpe definitivo. El CAI administró con sentido la diferencia, Rubén Garcés calentaba a la hinchada y Lescano y el omnipresente Quinteros dejaron todo resuelto (88-74) a tres minutos para el final. Mientras Rubio rumiaba ya la derrota, el CAI celebraba ya su histórico retorno a la ACB con la clasificación para la final con la mejor anotación en un partido de la Supercopa.
Ahora le queda el reto de truncar la maldición del anfitrión, que siempre cayó derrotado en la pugna por el título contra el Tau. El DKV, por contra, no podrá consumar su sueño de ser el tercer equipo, junto a Tau y Barcelona, que lleva a su sala de trofeos la Liga, Copa y Supercopa.
Fuente: FEB
http://ernestosport.blogspot.com/2008/09/supercopa-en-zaragoza.html
ResponderEliminarUn saludo!!!!!!!!