Con el comienzo del nuevo año y tras haber cargado las pilas en compañía de los seres queridos, la familia del baloncesto acomete un nuevo año ilusionante, esperanzador y con muchos retos por alcanzar.
No será fácil que se repitan los éxitos del año anterior, pero no por eso debemos de dormirnos en los laureles y acomodarnos pensando que la inercia conseguirá los resultados.
Desde los Seleccionados Nacionales, la liga ACB, las ligas FEB, las competiciones Autonómicas, las competiciones Provinciales, los clubes, la AEEB, los entrenadores, los colectivos arbitrales y las respectivas Federaciones, el Consejo Superior de Deportes, e incluso de los Patronatos Deportivos Municipales, hay que aunar esfuerzos para seguir progresando, la crisis económica nos tienes a todos inmersos en una batalla permanente que por momentos casi impide subsistir a algunos, pero no debemos permitir que nos atosigue, nos agobie y nos haga perder la guerra.
El baloncesto tiene recursos e imaginación suficiente como para salir a flote sean cuales sean las circunstancias que nos rodeen, hay que aguantar estos tiempos de tempestades que ya llegarán los tiempos de calma y de bonanza, pero eso sí hay que medir convenientemente cada paso que se de, dar pasos en falsos sobretodo en el aspecto económico puede ser muy contraproducente. Apretarse el cinturón es importante, mirar para lo nuestro todavía mas (LO NACIONAL Y LAS CANTERAS, ese es el quid de la cuestión).
Las competiciones autonómicas y algunas ligas nacionales (LEB PLATA, EBA, LF2, etc), necesitan un empujoncito o empujón de las altas esferas, de todos es sabido que algunos clubes están en la cuerda del alambre y cada semana es un milagro poder seguir existiendo, no nos podemos rascar el ombligo con una caña y esperar acontecimientos, legisladores y federativos deportivos deben buscar cambios organizativos que den un vuelco a la situación, hay que reunirse y establecer pautas de mejora, hacer seguimiento de las medidas que se establezcan y comprometer e implicar a los clubes, entrenadores, jugadores, árbitros, etc.
Establecer pautas, buscar subvenciones, trabajar el tema de la desgravación fiscal en el deporte, dar autonomía a quién corresponda y exigir responsabilidades desde "EL COMPROMISO Y LA IMPLICACIÓN DE TODOS".
No todo se puede solucionar desde las Instituciones y Organismos Públicos, por ello habrá que buscar políticas de actuación diferentes que nos acerquen a lo privado, es decir a las empresas. Me diréis y ¿cómo con la crisis que hay?, señores para eso está la imaginación del federativo, del legislador y del poder político y social.
Si se tiene que hacer una ley que permita desgravar de alguna manera a esas empresas si colaboran con el deporte que se haga, si se tiene que establecer otros mecanismos que se hagan, pero no nos quedemos con los brazos quietos viendo como el enfermo agoniza, busquemos la medicina adecuada para que se restablezca, si nos quedamos viéndolas venir ese antídoto nunca llegará, actuemos, hay que movilizarse, hay que revertir la situación, no nos rindamos, entre todos "PODEMOS".
Muy buen artículo, solo falta comentar que esto ocurre no solo en los clubes de un nivel superior, en las categorías bajas en muchos casos son los jugadores los que con una gran aportación económica tratan de tirar de esto.
ResponderEliminarHay que pedir un esfuerzo a todas las partes, porque si nadie baja sus pretensiones la cuerda se rompe quieras o no, grandes mecenas no hay, los patrocinadores les cuesta soltar dinero a un club de una importancia grande, cuando más a un club pequeño que tratar de buscar que sus asociados practiquen el deporte que les encanta.
En las categorías base, popularizar en algo los precios, para que clubes que estuvieron vuelvan ya no solo cuando tienen caballo ganador, sino cuando tienen que formar a chavales, que quizás ninguno llegue a nada en el baloncesto pero pueda aprender a jugar, competir y a aficionarse al baloncesto.
Aquí en Córdoba, con la liga femenina junior han hecho algo importante a mi modo de ver, que es popularizar precios para captar equipos femeninos, el año pasado los pusieron a precio de saldo, este año a un precio más adecuado, mientras los precios sean razonables esas chicas jugaran a baloncesto, la duda me entra en cuanto los precios se pusiesen al nivel de la liga masculina, dudo que ningún club femenino sénior afrontase la liga, pues cosas así intentar buscarlas en otras categorías.
Por parte de los equipos, también hay que trabajar pero me temo que estamos más en manos de los legisladores políticos y federativos, que en otra cosa, porque patrocinios hoy dia hay pocos, y rentables menos… la gran mayoría en categorías pequeñas se dan más por contactos por amistad o terceras personas que por otras vías.
Muchísimas gracias Eduardo por tocar este tema, que hoy día creo que preocupa más a todos que un resultado en particular.