"Organización defensiva en individual contra las penetraciones por línea de fondo"

**Rafa Sanz entrenador cordobés con grandísima experiencia en LEB (Cajasur Córdoba, Tenerife y U.B. La Palma), nos envía el siguiente artículo técnico que se publicó en la Revista Clinic (Nº 74, 2007). Su colaboración técnica se titula "Organización defensiva en individual contra las penetraciones por línea de fondo" y creemos que puede ser de mucho interés para cualquier entrenador y en especial para los entrenadores de formación. Agradecemos desde aquí a Rafa su interés y su generosidad por ofrecernos sus conocimientos y estamos muy contentos con que aportaciones como las suyas aumenten los contenidos tácticos del blog**.
"Organización defensiva en individual contra las penetraciones por línea de fondo"
Partiendo de la base que el éxito defensivo radica en una correcta responsabilidad individual en la defensa al balón, analizamos las ayudas y rotaciones a partir de una penetración por el fondo. 
La idea defensiva primaria, en nuestro juego, se basa en evitar que el balón esté o vaya al centro. A partir de esta norma cimentamos la construcción de nuestra defensa. Por lo tanto, las líneas de banda y fondo son las direcciones a las que pretendemos orientar el balón (gráficos 1 y 2).

(Gráficos nº1 y nº2)

Cuando se produce una penetración por el fondo producto de un desborde al defensor del balón, si no hay desborde no hay ayuda, nuestra idea es que sea un hombre grande (4 ó 5) el encargado de ir a la ayuda.

(Gráfico nº3)

Debemos ir midiendo la velocidad a la que se produce la penetración, para decidir si queremos forzar la falta en ataque o si buscamos el tapón. Mirar a los ojos del jugador con balón nos puede ayudar a adivinar las intenciones de finalización del atacante, sean las de pasar o las de tirar. Entrenar el momento de ayudar y el cómo hacerlo es un apartado fundamental en la construcción de una defensa (gráfico-3).

Mostraremos varios ejemplos de penetración por línea de fondo con diferentes estructuras ofensivas. Cuando un pívot juega abierto y el otro interior, las rotaciones implican a los jugadores que están situados en el lado de ayuda. En nuestra filosofía está que desde el lado de balón no se produzcan ayudas largas, por lo tanto el defensor del poste alto no realizará la 1ª ayuda (gráfico-4). “Ayudar a la ayuda” es un concepto que debemos inculcar a los jugadores para dotar de confianza a nuestra defensa y sus defensores. X2 irá al pase de salida fuera para 3 ó 2 (gráfico-5). X5 recupera con su par, y x3 que ha hecho la 2ª ayuda, fundamental hacerla antes que el interior haya ganado dentro de la zona, recuperará con el exterior libre, en este caso 2.

(Gráficos nº4 y nº5)
Una disposición ofensiva que aparentemente dificulta la penetración por el fondo, sitúa el poste medio del lado del jugador con balón ocupado (gráfico-6). Si el interior es capaz de bloquear al defensor que le defiende por delante o en ¾ por delante, dejará un hueco que puede ser aprovechado por el jugador con balón. X4 está bloqueado y tendremos que ayudar desde el lado contrario (gráfico-7). Siendo la estructura de ayudas y rotaciones la misma que en el ejemplo anterior.

(Gráficos nº6 y nº7)
Cuando el equipo atacante se coloca con sus dos pívots fuera de la zona, la norma es ayudar con el interior más alejado del balón. Es decir, ayudamos con el pívot del lado de ayuda (gráfico-8). X3 debe seguir los pasos de 5 que acompaña la penetración para que le doblen el balón y realizar la 2ª ayuda evitando una bandeja. X1 irá al pase de salida (gráfico-9).

(Gráficos nº8 y nº9)
Una disposición que dificulta la idea de ayudar con un interior en primera instancia es la que mostramos en el gráfico 10, aunque la saturación de jugadores grandes en el lado de balón es evidente, un bloqueo del poste bajo dejaría pinchado a nuestro defensor interior, si 4 es un buen tirador fijaría la ayuda de su par. En esta ocasión, sí que ayudamos con un exterior, el último hombre de nuestra defensa debe realizar la 1ª ayuda (gráfico-11). Dependiendo la recuperación contra el 1 rival de la distancia entre X4 y dicho jugador, y de la capacidad de X3 de defender la entrada al rebote de 4 desde el poste alto (gráfico-12). X1 siempre iría al pase de salida.

(Gráficos nº10, nº11)
Por lo tanto, pretendemos que el equipo no piense que las ayudas son la panacea de la defensa. Una buena defensa parte de una correcta defensa al balón, pero como es difícil tener todo y algo hay que ceder defensivamente, más vale que si nos rompen lo hagan por el fondo.
(Gráfico nº12)
Si es así, queremos ayudar con un grande (X4 ó X5), que siempre va a tapar más huecos y va a dificultar la finalización en mayor medida. La excepción es el último ejemplo que hemos puesto. La defensa de ayudas no está hecha para equipos con jugadores egoístas que piensan en esta cerca del aro para coger los rebotes fáciles que van a las estadísticas. Dureza en el 1x1 y altruismo en las ayudas y las rotaciones son los ingredientes para el éxito defensivo.
AUTOR: RAFA SANZ