Últimamente estoy viendo muchos partidos de categoría de formación, me gustan muchas cosas de las que veo, se nota en general el buen trabajo que los entrenadores realizan con sus jugadores y con sus equipos.
Hace poco vi un partido de categoría infantil, me llamó la atención por lo que ví desarrollar en la pista dos filosofías de juego completamente distintas y también dos actitudes muy distintas en el banquillo de uno y otro entrenador.
El equipo A, ocupaba muy bien los espacios en ataque (me sorprendió mucho ese detalle porque en esa edad no suele ser usual), siempre tenía intención de correr y sus ataques eran fáciles y sencilos, jugaban por conceptos, con poco o nulo uso de bloqueos, jugando mucho a penetrar y doblar, pasar y cortar, ir mucho al rebote ofensivo, con desparpajo para tirar de tres y su acierto no era malo del todo. Este equipo propugnaba una defensa proactiva, es decir trabajar para provocar el error del contrario huyendo de esperar a que fallara. Se notaba que su entrenador había dedicado bastante tiempo a incidir sobre los fundamentos básicos, bote, pase (me encantó como pasaban los jugadores, fuerte y rápido, con dos y con una sola mano. etc), rebote, tiro y 1c1. También destacaba su velocidad en el juego, participaban todos en ataque y se favorecía la toma de decisiones de los jugadores. En el banquillo su entrenador era sereno y pausado, con mucha paciencia y sin gestos ni hechos irascibles, ni a sus jugadores, ni hacia los árbitros. Parecía desde la banda contraria donde yo me encontraba que tenía calma y era bastante didáctico en sus correciones.
El equipo B, que también me gustó mucho y que también se apreciaba que estaba muy trabajado, tenía un estilo muy distinto. En ataque marcaban jugadas, los bloqueos hacían acto de presencia y se jugaba jugaba de forma mas sistemática. Su defensa sin querer decir con esto que fuera mala, era mas conservadora y menos proactiva, se flotaba mas en defensa, se cerraba mas sobre la zona y dejaba tirar esperando mas el fallo del rival que ir a buscarlo. En ataque se jugaba mas encorsetado y con los roles de los jugadores muy definidos, bueno en realidad era un par de jugadores los que llevaban la voz cantante. El equipo jugaba con una disciplina impropia de la edad, pero tengo que reconocer con máxima efectividad en cuanto al juego del equipo y al resultado final. Su entrenador no paraba de dar instrucciones y cualquier fallo de un jugador lo recriminaba e incluso en ocasiones les abroncaba, aunque daba la sensación que los jugadores estaban acostumbrados, especialmente en los tiempos muertos y cuando las cosas se torcian. También estaba constantemente haciendo observaciones a los árbitros.
El partido lo ganó el entrenador del equipo B por pocos puntos, cómo podéis ver dos estilos contrapuestos, más de una vez habreis visto equipos y entrenadores así, a mi me gusta en esas edades la filosofía del equipo A, porque creo que es la esencia que define las señas de identidad del juego en categorías de base y además creo que siembra mas y mejor para el futuro aunque el resultado del presente sea peor. No obstante, no seré yo el que me atreva a criticar eso, porque en mi trayectoria como entrenador he sido bastante tiempo del tipo B (especialmente en mis comienzos), aunque con la experiencia y con la edad, he evolucionado hacia ser entrenador del tipo A, humildemente creo que es el mejor camino que podemos escoger para nuestros jugadores, aunque a veces es mejor camino en pos de resultados y títulos . ¡Juzguen ustedes!, dejo la zona de comentarios del blog a su disposición.
Hola profesor, no tiene idea como me a caído de cajón esta reflexión, yo soy un entusiasta entrenador del tipo A, y he recibido un equipo con un entrenador del tipo B…. Nos a costado un montón afiatarnos… Quizás por ser más novato, creo que la transmisión de información puede ser sin necesidad de gritos y presiones y si bajo la calma y el entendimiento siempre y cuando el receptor tenga una actitud de aprendizaje y no siempre de competencia…. Pero todos al día de hoy quieren el camino corto hacia el triunfo….
ResponderEliminarAgradezco enormemente todo lo que usted enseña
Un abrazo desde Chile